Inteligencia y Seguridad Frente Externo En Profundidad Economia y Finanzas Transparencia
  En Parrilla Medio Ambiente Sociedad High Tech Contacto
Inteligencia y Seguridad  
 
29/01/2008 | Las FARC: el fracaso de un terrorismo

Guillermo Hirschfeld

Las FARC: el fracaso de un terrorismo de Eduardo Mackenzie es, ante todo, un libro necesario. Un libro necesario porque aborda la historia de las FARC, la banda narcoterrorista Colombiana, que sigue matando, que sigue secuestrando y que en la actualidad forma parte del nefasto club de enemigos de la libertad. Un club que azota y fustiga a Occidente.

 

En el caso de las FARC su interminable y abominable violencia es ejercida sobre el corazón mismo de la ya maltratada América Latina: en la República de Colombia. El libro representa una bocanada de aire fresco porque contribuye a echar luz sobre un debate de por si complejo. Un debate en el cual muchas veces, impera la desinformación, la confusión, el engaño y la mentira.

Causa pavor que todavía existan personas con cierto grado de inteligencia y de integridad moral que encuentren justificación para las aberrantes acciones que las FARC colombianas llevan a cabo. Estos se amparan y refugian en el argumento de que existe una supuesta lucha del campesinado ante la opresión o en otras explicaciones análogas. Resulta asombroso que una pandilla de bandoleros financiados por cuantiosas sumas de dinero provenientes del narcotráfico sean legitimados como paradigma de una  lucha supuestamente justa. Desafortunadamente, sujetos con esta opinión no faltan. El ex Ministro colombiano Fernando Londoño en el Preámbulo del libro, con la claridad que lo caracteriza, despeja las dudas y nos explica el por qué de este fenómeno en los siguientes términos: “…Los amigos o simpatizantes de las FARC ignoran su historia sangrienta y su despreciable presente. Eso es todo” (Pág. 19)

Por eso el libro de Mackenzie es indispensable. Porque es una obra acabada y exhaustiva. Un estudio sobre los orígenes de la violencia subversiva en Colombia. Por sus páginas discurren de forma detallada todos aquellos acontecimientos relevantes de la historia colombiana del último siglo. Los sucesos que sirvieron de cimiento a la interminable guerrilla que azota a ese gran país, a la lacra narcoterrorista que todavía sigue clavada en la selva colombiana. Tenemos ante nosotros un estudio impecable. En sus líneas, con una precisión envidiable, se van hilvanando los hechos hasta llegar a nuestros días.

El relato sitúa su punto de partida en el episodio de la “masacre de las bananeras” fruto de la huelga contra la United Fruit Company en 1928. El sangriento episodio que se cobró la vida de centenares de personas es - según el autor-  un mito fundador para la izquierda colombiana. Los violentos sucesos ocurridos por esas fechas se asemejan como apuesta política a aquella impostura que fue la Comuna de París para la izquierda francesa.

Para el autor, la influencia soviética siempre estuvo detrás de los actos violentos que los grupos insurrectos desarrollaron en Colombia. Este dato, que es muy significativo, y la tesis acerca de que en Colombia no tuvo forma una verdadera corriente socialista, sino que históricamente en el Partido Liberal siempre había una facción lista para cobijar a las peores derivas comunistas, conforman el cocktail que le da vida a la siguiente secuencia de la obra. Cronológica e ineludiblemente el hilo conductor del texto nos lleva al trágico Bogotazo. El denominado Bogotazo, se desencadena el 9 de abril de 1948 con el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán y este suceso no sólo se llevará la vida de cientos de miles de personas, sino que abre una herida que no cicatrizará hasta nuestros días. 

A partir de ahí el autor despliega sobre las páginas una descripción minuciosa de todos los eventos que se sucedieron y que dieron origen y desarrollo a las FARC. No omite ningún dato, fecha y nombre que sea relevante a tal efecto. Conecta de manera quirúrgica aquellas agitaciones que comenzaron en 1926 con la matanza del Club El Nogal del año de 2003 en dónde mueren treinta y siete civiles –seis niños-. Las cruentas “hazañas” del asesino Tirofijo (Manuel Marulanda, líder de la banda), la relación de la banda terrorista con la Habana, las conexiones con otros grupos terroristas  extranjeros, la aparición del M-19, el secuestro de Ingrid Bentacourt, las aparición de las autodefensas ilegales o “paras”, la zona desmilitarizada cedidas por el presidente Pastrana, son algunos de los puntos que fluyen a través del texto y que el autor elige para otorgarle luz al debate.

Hay dos ideas que atraviesan de manera transversal todo el libro, vale la pena enfatizarlas, y me quiero detener en ellas. La primer idea-fuerza es que, sin lugar a dudas, nos encontramos frente a una banda terrorista que asesina, secuestra, tortura y extorsiona. Son delincuentes de la peor calaña que entre sus canalladas incluyen: mantener secuestrados a cientos de inocentes en cautiverio, reclutar a niños en sus filas para su adoctrinamiento, utilizar minas antipersonales, cometer crímenes sanguinarios,  depredar el medio ambiente, talando árboles y contaminando ríos… Son, en definitiva, el último eslabón de una cadena totalitaria que no escatima en medios para lograr un único objetivo: dictar, planificar y ejecutar el proyecto de vida de las personas. La segunda idea que destaco y que es muy importante es la siguiente: el apaciguamiento y el dialogo con quien utiliza el terror como medio para obtener fines políticos solo conduce al fracaso. Lo demuestran los hechos históricos y el sentido común. Realizar concesiones a quiénes las exigen a través de la amenaza terrorista, genera incentivos para que lo repitan una y otra vez, y asimismo, cometiendo este error, se los alimenta de manera tal que regresan fortalecidos. En este sentido, la única paz posible es la que ofrece la aplicación, con todo su rigor, del imperio de la ley y del Estado de Derecho dentro de una democracia liberal. Es imperativo moral de las sociedades libres acabar de esta manera con este fenómeno abominable.

Por último, decir que el aporte del ensayo de Mackenzie es esencial. Occidente y América Latina, en particular, necesitan cada vez más de de la difusión de información veraz. Los enemigos de la libertad también han iniciado una guerra política a través de batallas culturales cuyo objetivo es distorsionar la verdad. Lo hacen en América latina y lo hacen en Europa. A Ronald Reagan le preguntaron una vez si tenía uno plan para la guerra fría. El entonces presidente de los Estados Unidos no vaciló y contestó: “Si, tengo un plan: nosotros ganamos, ellos pierden”, la máxima de Reagan para la guerra fría es también inapelable en la actual batalla cultural contra el terrorismo y los enemigos de la libertad. Mackenzie lo sabe y su obra es un valioso aporte para colaborar en esta ardua batalla.

Guillermo Hirschfeld es Coordinador de Programas para Iberoamérica en la Fundación Faes.

(Del libro Las FARC: el fracaso de un terrorismo, de Eduardo Mackenzie. Colección actualidad – Debate - 2007)

Grupo de Estudios Estratégicos (España)

 


Otras Notas Relacionadas... ( Records 1 to 10 of 1474 )
fecha titulo
31/05/2015 El medido órdago de las FARC
28/01/2015 Colombia - La policía rural planteada por Santos, ¿contempla a los desmovilizados de las FARC?
20/12/2014 Colombia - Delito político
20/12/2014 Colombia - La suerte de Santos
07/11/2014 Colombia: los agricultores de las FARC
06/10/2014 Colombia - ¿Qué pasó con el dinero de la mafia que habría recibido Santos?
06/10/2014 Colombia - La otra cara de la paz
06/09/2014 Colombia - Para que Emanuel entienda
31/08/2014 Mantener el conflicto armado en Colombia es un mal negocio
23/08/2014 Colombia - Cali, Fábrica de armas hechizas


 
Center for the Study of the Presidency
Freedom House