La Casa Blanca echó mano ayer de otro sombrío reporte económico para presionar por su plan de estímulo que el Senado debatirá desde el lunes, y anunció la formación de un grupo especial para presentar políticas públicas y legislación que impulsen a la abatida clase media del país.

Y para afianzar la imagen de que se está tomando en cuenta a la clase trabajadora, el presidente Barack Obama firmó tres órdenes ejecutivas que revierten políticas de su predecesor, George W. Bush, y que fortalecerían a trabajadores y los sindicatos que los representan.

El grupo especial será encabezado por el vicepresidente Joe Biden, quien declaró que el objetivo es "mejorar el estándar de vida de la gente que es el eje de este país".

Integrarán el grupo especial los secretarios de cuatro dependencias clave: Salud, Trabajo, Educación y Comercio, así como asesores económicos de la Casa Blanca.

De esos secretarios, sólo el de Educación está en funciones, porque las nominaciones de Hilda Solís, para el Departamento del Trabajo, y de Tom Daschle, para el de Salud y Servicios Humanos (HHS), permanecen estancadas a nivel de comité en el Senado.

Asimismo, Obama no ha designado a su secretario(a) de Comercio, pero se menciona que podría ser el senador republicano Judd Gregg.

Biden indicó que la primera reunión del grupo especial será el 27 de febrero en Philadelphia.

El enfoque de esa reunión será el de los trabajos que pueden generarse mientras se protege al medio ambiente y se buscan fuentes alternas de energía (green jobs).

"Posteriormente, durante cada mes, nos concentraremos en otro tema de preocupación y en otra parte del país", dijo Biden. Agregó que los temas van desde la creación de empleos hasta el cuidado infantil, seguro médico, cómo pagar por la universidad, entrenamiento educativo y laboral, así como la jubilación, entre otros.

Obama señaló que cuando hablan de clase media también se refieren a esos trabajadores que aspiran a llegar a la clase media. "No nos estamos olvidando de los pobres", aclaró.

Biden anunció también que comenzó a funcionar un portal en la internet, www.astrongmiddleclass.gov, donde los interesados pueden informarse de las medidas que irá tomando el grupo especial y también pueden presentar sus ideas específicas.

Entre tanto, la ceremonia evidenció el cambio de inquilino en la Casa Blanca, cuando Obama firmó órdenes ejecutivas que conceden mayores poderes a los trabajadores y a quienes los representan, argumentando que las políticas previas se inclinaban a favorecer a los empleadores.

Por ejemplo, una de las órdenes exige que si un contrato federal está a punto de expirar, el contratista tiene que ofrecer los empleos primero a los trabajadores que están en funciones.

Obama declaró que "el movimiento sindical no es parte del problema sino parte de la solución", arrancando aplausos de los presentes.

Biden, por su parte, fue más directo: "Bienvenidos nuevamente a la Casa Blanca", indicó a la concurrencia, refiriéndose a los pasados ocho años de administración republicana, no precisamente aliada del movimiento sindical.

"Es un nuevo día para los trabajadores", indicó el presidente de los Teamsters, Jimmy Hoffa.