El Informe del Foro Económico Mundial (“The Global Competitiveness Report 2009-2010”) es categórico: Bolivia retrocedió en materia de competitividad mientras que Suiza superó a los EEUU. Así, hoy estamos más lejos de Suiza pero más cerca de Madagascar, Tajikistán, Kirguistán, Paraguay, Nepal, Timor-Leste, Mauritania, Burkina Faso, Mozambique, Mali, Chad, Zimbabwe y Burundi, los únicos a quienes superamos.
Entre los 133 países analizados Bolivia bajó al puesto 120 (ocupaba el 105 el 2007) implicando que el Índice de Competitividad Global (ICG) de otros 119 países supera al nuestro, entre ellos: Malawi, Etiopía, Mongolia, Ghana, Zambia, Camerún, Camboya, Bosnia-Herzegovina, Uganda, Lesotho, Bangladesh, Guyana, Benin, Surinam, Tanzania, Nigeria y Kenia.
El ICG valora la institucionalidad, infraestructura, estabilidad macroeconómica, salud y educación primaria, educación superior y capacitación, eficiencia del mercado de bienes y del mercado de trabajo, sofisticación del mercado financiero, adaptabilidad tecnológica, tamaño de mercado, facilidades para hacer negocios, e innovación.
El país latinoamericano con mejor ICG es Chile (puesto 30) y destacan además Costa Rica (55), Brasil (56), Panamá (59), México (60), Uruguay (65), Colombia (69), El Salvador (77) y Perú (78). El ICG de Bolivia es el peor del continente.
Para el Foro, la competitividad tiene que ver con “el conjunto de instituciones, políticas y factores que determinan el nivel de productividad de un país”. Las economías más competitivas producen mayores ingresos para sus ciudadanos y mejores retornos al inversionista: competitividad y progreso, van de la mano.
¿Quiénes son los diez más competitivos? Suiza, EEUU, Singapur, Suecia, Dinamarca, Finlandia, Alemania, Japón, Canadá y Holanda. Algo bueno tendrán Suiza y Singapur —dos pequeños países— para estar tan bien ubicados.
Suiza, con sólo 41.290 km2 (casi como Tarija) y menos de 8 millones de habitantes, es uno de los países más ricos; su PIB supera los 490.000 millones de dólares y su Ingreso Per Cápita los 67.000 dólares. Singapur, una isla que no llega a los 700 km2 ni a 5 millones de habitantes, es uno de los “tigres asiáticos”; su PIB supera los 220.000 millones de dólares y su Ingreso medio los 50.000 dólares. Lo común entre Suiza y Singapur es que si bien no tienen abundantes recursos naturales, ambos cuentan con sólidas instituciones, economías de mercado industrializadas y políticas de Estado muy confiables.
Bolivia, con más de 1 millón de km2, diez millones de habitantes y recursos naturales de sobra, tiene un PIB de 17.000 millones de dólares y un ingreso per cápita de 1.700 dólares. ¿Qué hace la diferencia? El Informe da algunas luces: pobres niveles de gobernanza, excesiva burocracia, creciente inseguridad, y un deficiente desarrollo del mercado de factores, infraestructura y educación.