Esta mañana  la radio registró cómo los habitantes de las ciudades fronterizas entre Colombia y Venezuela, viven el conflicto diplomático entre los dos gobiernos. En Caracas algunos habitantes expresaron sus opiniones sobre las declaraciones bélicas de Chávez.

Según los habitantes de la capital venezolana, el anuncio del presidente de preparar sus tropas para cualquier ataque desde territorio colombiano es un “acto irracional”, según reportó la cadena radial Caracol.

Carlos Suárez, un conductor de taxi en esa ciudad contó que una guerra con Colombia es “impensable” y que el mandatario venezolano está pasando por encima de la Constitución.

Carlos reconoció que vivir en Venezuela es muy difícil. “Realmente se ha convertido en una zozobra en cuanto a la seguridad, a la salud, a los alimentos, realmente es muy difícil tener un futuro, poder criar a unos hijos correctamente”.

A esta voz de protesta también se le sumaron otros ciudadanos de Caracas quienes aseguraron que la actitud y los pronunciamientos de Chávez “no tienen sentido”. “Colombia y Venezuela es un solo pueblo, son una sola familia, no van a pelearse entre ellos” agregó Jorge Flores, empresario en la capital venezolana.

RCN Radio también recorrió Ureña, otra de las ciudades fronterizas que vive las consecuencias del conflicto. Un habitante de esa ciudad aseguró que “aparentemente la situación es de calma, pero se vive con miedo porque hay muchos comentarios (...) aquí no tenemos libertad para nada y todo nos da miedo”.

El arzobispo de Caracas, monseñor Jorge Urosa Sabino habló con Caracol Radio y aseguró que su país, en vez de hablar de enfrentamientos con Colombia, debe primero acabar con el “conflicto de guerra de delincuencia” que vive internamente.

El cardenal Urosa Sabino destacó que los venezolanos no están en plan de guerra. “Los venezolanos queremos paz, especialmente para vivir con serenidad en medio de las circunstancias difíciles que tenemos”, indicó.

Otra voz de la iglesia católica que también rechazó la postura del mandatario venezolano fue el vicepresidente de la Conferencia Episcopal de ese país, Monseñor Baltazar Porras.

Según él, los venezolanos y los colombianos no están promoviendo el enfrentamiento entre las dos naciones y que es un error del mandatario de ese país invitar a la guerra. Baltasar Porras aclaró que el gobierno venezolano ha caído en un grave error al preocuparse más por asuntos internacionales, descuidando lo interno.

Por su parte, el ex ministro de Defensa y contradictor acérrimo de Chávez, Juan Manuel Santos, se pronunció sobre la difícil situación diplomática entre las dos naciones. Santos aseguró, en diálogo con La FM, que el pronunciamiento de Chávez donde invita a la guerra y prepara a sus fuerzas militares para estar alertas, “es una excusa para armar una tormenta en un vaso de agua… lo que quiere es tratar de armar un lío por los problemas internos que el presidente Chávez tiene en su país”.

El gobierno venezolano tildó ayer, a través de un comunicado, de "mentiroso", "inmoral" e "hipócrita" al gobierno colombiano por decir que las bases militares no serán para promover la guerra en el hemisferio. Frente a esto, el ex ministro Santos dijo que “no es la primera vez que pasa porque durante los 11 años lo que ha hecho es pelear con todo el mundo… ha perdido la oportunidad de enderezar a Venezuela y lanzarla por el camino del buen desarrollo”.