Tan sólo en Karachi, la ciudad más grande de Paquistán y capital de Sindh, murieron ayer 12 personas. Otras 13 perdieron la vida como consecuencia de los enfrentamientos del lunes.
Los disturbios empezaron el sábado, en el marco de unos comicios locales para ocupar un cargo que quedó vacante en Sindh cuando el legislador local fue asesinado, en agosto.
Grupos de la mayoría de lengua urdu se enfrentaron con la minoría de idioma pashtu.
Hombres armados secuestraron a varios de sus rivales y los ejecutaron, según las autoridades. Un policía vestido de civil fue alcanzado por una bala perdida. El Movimiento Muttahida Qaumi (MQM), el partido urdu, atribuyó la responsabilidad de los disturbios al Partido Nacional Awami, de la minoría pashtu. Éste rechazó las acusaciones. Ambas formaciones tienen un largo historial de violencia.
El Movimiento dice representar a los descendientes de quienes llegaron de India cuando Paquistán se creó en 1947, mientras que los pashtunes de Awami son oriundos de las tierras donde nació el Talibán.
El legislador provincial asesinado, Raza Haider, era del Movimiento. Aunque ambos partidos competían por su banca, Awami se retiró la noche del sábado entre denuncias de fraude contra su rival, que terminó por ganar la elección.
El Movimiento, según diversas fuentes, amenazó ya con retirarse del gobierno de coalición que integra junto al Partido del Pueblo de Paquistán del presidente Asif Ali Zardari. La medida, que según las fuentes fue “suspendida” luego de recibir garantías de acciones enérgicas para detener la violencia, podría provocar que el gobierno pierda la mayoría en la Asamblea Nacional, o incluso su caída si el MQM decide alinearse con la oposición.
Preparan ayuda
Estados Unidos, en tanto, prepara un paquete de ayuda por 2 mil millones de dólares para Paquistán, con el fin de mejorar su capacidad de lucha antiterrorista, y prevé anunciarlo esta semana, durante el tercer diálogo estratégico de ambos países. La ayuda permitirá a Paquistán luchar mejor contra los extremistas en su frontera con Afganistán, dado que insiste en que no tiene la capacidad suficiente para perseguir a los terroristas y necesita más apoyo de EU, según informó ayer la cadena de televisión CNN.
El paquete tendrá una vigencia de cinco años y Paquistán pretende usarlo para comprar helicópteros, sistemas armamentísticos y equipos para interceptar comunicaciones.
Los 2 mil millones de dólares se sumarían a la ayuda no militar de 7 mil 500 millones de dólares durante cinco años que el Congreso aprobó el año pasado.
En el más reciente diálogo estratégico, celebrado en julio en Islamabad, la secretaria de Estado, Hillary Clinton, anunció una ayuda de más de 500 millones de dólares para Paquistán, para destinarla a la renovación de hospitales, mejorar la distribución de agua y represas hidroeléctricas, entre otros proyectos. Pero EU ha tenido que revisar sus planes después de las graves inundaciones del verano pasado en Paquistán que causaron mil 800 muertos y 21 millones damnificados.
Estados Unidos ha donado casi 400 millones de dólares a Paquistán tras las inundaciones y ha aportado 26 helicópteros para los rescates, además de material de primera necesidad para los desplazados.
