No obstante, el presidente Colombiano es blanco de una lluvia de pedidos para que en esta ocasión no cumpla con su palabra.

Quienes formulan los pedidos sostienen que es mucho lo que Makled sabe sobre la presunta vinculación entre integrantes de la máxima esfera del gobierno venezolano con las redes del narcotráfico y que esa información se perdería para siempre si el hombre es trasladado a ese país.

“Si Makled es enviado a Venezuela, su futuro y el futuro de aquellos que podrían ser implicados por su testimonio será cuestionable”, dijo el congresista republicano por el estado de Florida Connie Mack, en una carta dirigida a Santos.

“Le estoy escribiendo para reiterarle que esa decisión sería vista muy negativamente desde el Congreso de Estados Unidos”, advirtió el congresista , quien preside el subcomité para el Hemisferio Occidental de la cámara baja. “[Makled] es “extremadamente importante para Estados Unidos y la seguridad regional”.

Las expectativas sobre el destino final de Makled se acrecentaron a finales de la semana pasada, luego que la Corte Suprema de Colombia autorizara el traslado del presunto narcotraficante, cuya extradición es solicitada simultáneamente por Venezuela y Estados Unidos.

El pronunciamiento dejó en manos de Santos el país al que será extraditado el antiguo dueño de la línea aérea Aeropostal y de lucrativas concesiones en los principales puertos y aeropuertos de Venezuela, quien es solicitado por la justicia estadounidense por presuntamente enviar cerca de diez toneladas mensuales de drogas a Estados Unidos y Europa.

No obstante, el mandatario colombiano había anunciado previamente su decisión de enviárselo a Chávez.

“Yo le di mi palabra al presidente Chávez de que una vez se surtan los trámites jurídicos, a los cuales estamos obligados, nosotros le entregaríamos a este individuo a las autoridades venezolanas”, dijo Santos en noviembre.

“Yo siempre he creído que la palabra hay que cumplirla y la voy a cumplir”, enfatizó.

Esto, sin embargo, sería un gran error, declaró el ex embajador de Venezuela ante las Naciones Unidas, Diego Arria, en una carta dirigida a Santos.

“Equivaldría a archivar […] el caso de la más prominente red criminal de narcotráfico de América Latina, de la cual presuntamente formarían parte jerarcas militares y civiles del régimen venezolano”, comentó Arria.

“Ninguno de estos particulares le son hoy desconocidos a usted, pues como ex ministro de la Defensa ha de haber sido de su conocimiento que la llamada ‘Mafia del Puerto’, liderada por Walid Makled desde Puerto Cabello, tenía nexos con el principal cartel de la guerrilla de las FARC, a la que entregaba armas a cambio de cocaína. Y este aspecto creo es de interés para el pueblo colombiano del cual Hugo Chávez no es para nada su mejor amigo”, añadió Arria.

Las autoridades venezolanas han desmentido que el caso quedaría en el limbo si Makled es enviado al país petrolero.

“Las investigaciones no se detienen porque una persona haya sido o no extraditada, independientemente de que algunas diligencias no se profundizan, no significa que se paralizan, eso no es así”, aseveró recientemente Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz.

Pero el propio procurador de Colombia, Alejandro Ordóñez, dijo tener sus dudas.

En declaraciones distribuidas por la Associated Press, Ordóñez señaló que debido a que las declaraciones de Makled apuntan a que mantuvo una estrecha relación con funcionarios del gobierno de Hugo Chávez, lo más conveniente sería entregárselo a las autoridades estadounidenses.

Makled, quien ha sido entrevistado por la prensa en numerosas ocasiones desde que fue encarcelado en agosto de 2010, ha dicho estar dispuesto a colaborar con las autoridades de Estados Unidos para evitar ser extraditado a Venezuela. Entre las diferentes revelaciones brindadas desde su encarcelamiento, el empresario admitió que varios altos funcionarios de Chávez estaban bajo su nómina.

Esa información ha sido corroborada por las autoridades estadounidenses, quienes acusan a Makled de operar y controlar varias pistas de aterrizaje en Venezuela para exportar droga hacia Estados Unidos .

“[Makled ponía las pistas a disposición de los narcotraficantes para] facilitar los envíos de varias toneladas de cocaína desde Venezuela a Centroamérica y México [...], sabiendo que una porción de ellas estaban destinadas a los Estados Unidos”, informó el departamento de Estado al acusar a Makled.

“Para asegurar el libre tránsito de estos envíos de cocaína, Makled García sobornaba a funcionarios venezolanos con tarifas que cobraba a las organizaciones del narcotráfico”, agregó la acusación.

El ex embajador de Estados Unidos ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Roger Noriega, sostuvo que los vínculos que Estados Unidos también está interesado en asegurar la extradición de Makled ante denuncias de que en su organización operaba con agentes vinculados con organizaciones terroristas de Orientemedio.

Según Noriega, quien ha estado siguiendo de cerca los vínculos entre el gobierno venezolano y el terrorismo, cuatro de las mencionadas empresas realizaban operaciones con el líder de la creciente red del Hezbolá en Venezuela.

“Esto no es solamente una red de narcotráfico”, dijo Noriega recientemente en una entrevista telefónica. “Es una red que beneficia al Hezbolá y las operaciones de esta organización en el Hemisferio Occidental”.

ADELGADO@ELNUEVOHERALD.COM