Durante las protestas del país altiplánico, el mandatario boliviano sostuvo que China apoyará con la ejecución de este proyecto.
Evo
Morales, presidente boliviano, anunció la construcción de un ferrocarril de
1.200 kilómetros que unirá los puertos de Brasil, a través de territorio
boliviano con los puertos de Perú y Chile, como parte de los acuerdos logrados
con China, donde estuvo los últimos cinco días.
Asimismo,
sostuvo que Pekín respaldará la ejecución de esta vía, con algunos recursos
naturales.
Estas
declaraciones fueron efectuadas durante la protesta de unos 600 indígenas de
los pueblos moxeño, yuracaré y chimán que rechazan la construcción de una
carretera de 306 kilómetros, que dividirá en dos la reserva ecológica Tipnis
(Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure), en los departamentos de
Beni y Cochabamba.
“Hay
empresas petroleras interesadas en perforar en los límites de ese parque y el
gobierno tiene prisa en explorar donde haya mayores posibilidades de hallar
hidrocarburos. La obra atravesará el lugar, uno de los pocos aún no devastado
en el mundo”.
En
tanto, las rutas a Potosí y Tarija están bloqueadas. Los potosinos exigen
construir un aeropuerto y una fábrica de cemento, así como una solución al
conflicto de límites con el departamento de Oruro.
Además,
demandan un diálogo con el presidente Morales.