El candidato a liderar el Partido Republicano en las elecciones presidenciales Mitt Romney ha rectificado este viernes al respaldar ahora la promoción del inglés y el español como lenguas vehiculares en Puerto Rico, después de exigir como condición 'sine qua non' la adopción de la lengua anglosajona como la oficial en la isla para que Puerto Rico pase a ser un estado norteamericano.
En su
intento por enmendar la situación, Romney ha asegurado que "apoyará al
pueblo de Puerto Rico" si resulta vencedor en los comicios presidenciales
"en caso de que decida convertirse en un estado" norteamericano,
"para lo cual no impondré precondiciones".
Máxime,
Romney ha aceptado la promoción del español y el inglés como lenguas
vehiculares en Puerto Rico en pos de la diversidad cultural, fruto del
"legado" cultural, si bien ha retratado al inglés como "la
lengua de la oportunidad".
Este
movimiento de Romney responde a la política esgrimida por Santorum, quien el
pasado miércoles se mostró partidario de condicionar la unión formal y oficial
de Puerto Rico a Estados Unidos a la adopción del inglés como lengua vehicular,
un requisito que no ha sido explicitado a ningún otro estado miembro. Como
consecuencia, un delegado adscrito en la lista de Santorum en las elecciones
primarias que se celebrarán este domingo en Puerto Rico ha revocado su
afiliación a la candidatura del exsenador por considerar la postura de Santorum
de "ofensiva".
Los
puertorriqueños votarán en un referéndum el próximo mes de noviembre si deciden
iniciar el proceso de adhesión a Estados Unidos o permanecer bajo el paraguas
de Washington con el actual régimen, semiautónomo, con beneficios en términos
económicos y comerciales.
Con 20
delegados en juego en una ajustadas primarias, Romney ha viajado este viernes a
Puerto Rico, donde, además, ha de remendar su antigua oposición al nombramiento
de Sonia Sotomayor, de origen puertorriqueño, como juez de instrucción federal
y, a posteriori, miembro del Tribunal Supremo. De hecho, el exgobernador de
Massachusetts reprocha en uno de sus anuncios de campaña a su principal rival
en la carrera republicana hacia la Casa Blanca, el exsenador por Pennsylvania
Rick Santorum, por apoyar la candidatura de Sotomayor al Supremo.
Al
respecto, Romney ha argumentado que su perspectiva difiere de las políticas que
abandera Sotomayor, ha informado la cadena estadounidense CBS. "Estaría
contento de tener a un descendiente puertorriqueño o a un ciudadano
puertorriqueño en el Tribunal Supremo, pero tendría que compartir mi filosofía
judicial, que es lo primero", ha matizado.