El Banco Mundial sostiene que la desigualdad social es el principal impedimento para acelerar la prosperidad de la región.
La evolución económica y social de América Latina en las últimas dos décadas es inapelable, sin embargo, el Banco Mundial alerta de que, pese a los evidentes progresos, América Latina no alcanzará el nivel de bienestar de los países más desarrollados hasta 2052. En el informe, Cambiando el ritmo para acelerar la prosperidad compartida en América Latina y el Caribe, que la organización ha presentado este viernes, se señala a la desigualdad social como el principal obstáculo para alcanzar esos niveles de prosperidad antes de esa fecha y se recomiendan varias reformas -políticas fiscales progresivas, transparencia y eficacia institucional, accesibilidad a los mercados o mejora del nivel de gestión de riesgos macro y microeconómicos- para acelerar ese proceso.
“En América Latina harán falta dos generaciones para alcanzar el nivel de bienestar de los países más desarrollados de la OCDE, contando con que el crecimiento económico se mantenga en los mismos niveles”, explica Louise Cord, directora del Grupo de Género y Reducción de la Pobreza del Banco Mundial y responsable del informe. Cord advierte de que si los Gobiernos de la región no abordan el problema de la desigualdad social, la fecha podría dilatarse 10 años más (de 2052 a 2062).