El propio Trump rechaza regularmente cualquier tipo de reproche antisemita refiriéndose a su hija, Ivanka Trump, quien se convirtió al judaísmo cuando se casó con Jared Kushner, un judío ortodoxo que actualmente trabaja como asesor del presidente en la Casa Blanca.

Trump esperó demasiado tiempo para condenar el creciente número de incidentes antisemitas, agregó Elsner. Del mismo modo argumentó Jack Rosen, presidente del Congreso Judío Americano en Nueva York: "Muchos hubiéramos querido que el presidente se refiriera antes a los incidentes”.

Durante las primeras horas del domingo, un centenar de lápidas de piedra fueron derribadas en el cementerio judío "Monte Carmelo” en Filadelfia. La policía no tiene pistas. Los autores de la profanación en el cementerio de Saint Louis, Missouri, ocurrido dos semanas atrás, aún no han sido encontrados por las fuerzas de seguridad que los rastrean desde entonces.

La rabina Deborah Waxman se quejó de la profanación al cementerio de su ciudad natal en Filadelfia: "Estamos profundamente afectados por este ataque a nuestra comunidad”. Es muy probable que las tumbas de sus familiares también resultaran dañadas.

En los últimos dos meses, las autoridades de Estados Unidos han registrado 90 llamadas telefónicas con amenazas de bomba contra instituciones judías. Amenazas que son remarcadas con numerosos rayados antisemitas en las ciudades estadounidenses. En las universidades, grupos de derecha exacerban los ánimos contra sus compañeros judíos.

Alan Elsner ve una conexión entre la nueva autoconfianza de los movimientos de extrema derecha y la presidencia de Donald Trump: "Los grupos antisemitas obtienen a través de la acción política del presidente Trump nuevo impulso”, dice. También se sienten alentados por el nuevo y principal asesor del presidente, Steve Bannon, creador del portal ultraderechista "Breitbar".

El nuevo fanatismo en Estados Unidos debería ser combatido con más fuerza, exigió en Twitter la Liga Antidifamación. La organización, que lucha contra la discriminación hacia los judíos, está ofreciendo una recompensa de US$10 mil por la captura de los autores de la profanación al cementerio en Filadelfia.

Estos casos no se tratan sólo de ataques contra los judíos, sino sobre las minorías en todos los estados federales. Expertos como Jack Rose y Alan Elsner se refieren al tema como una situación de tensión en todo el país que no sólo afecta a los judíos de Estados Unidos, sino a representantes de otras minorías como musulmanes e inmigrantes de América Latina.