Sustituirá en el cargo al también italiano Antonio Tajani, mano derecha de Silvio Berlusconi y uno de los líderes del Partido Popular Europeo (PPE) en la cámara, y lo hará con 345 votos a favor, superando así los 334 necesarios para obtener la mayoría absoluta.

Sassoli ya tiene una larga experiencia en la cúpula de la Eurocámara, ya que ha sido uno de los vicepresidentes de la institución desde el año 2014. Ahora ocupará el máximo cargo durante la primera mitad de la legislatura, para después, siguiendo con la tradición democrática europea, ceder el testigo a un candidato del PPE.

“Europa necesita ser más fuerte y solo puede serlo si tiene un Parlamento robusto que juegue un papel importante”, ha señalado en italiano durante su primer discurso como presidente, destacando así el principal tema hoy en Estrasburgo: el choque con el Consejo Europeo después de que este desoyera la petición del Parlamento Europeo de escoger el próximo presidente de la Comisión Europea entre los ‘spitzenkandidaten’ que participaron en los comicios europeos.

Los socialistas recuperan así la presidencia del Parlamento Europeo después de que lo abandonara el alemán Martin Schulz en 2017 para ser el candidato de los socialdemócratas en las elecciones alemanas. Pero su elección no ha sido sencilla para los progresistas en la Eurocámara: tras el resultado del Consejo Europeo, el ambiente estaba muy crispado, con mucha indignación y revuelo. El SPD, la delegación alemana en el grupo socialdemócrata, ha decidido, de hecho, votar en la primera ronda por la candidata de Los Verdes, la alemana Ska Keller.

Como gesto de protesta contra la imposición del Consejo Europeo los socialistas en la Eurocámara apostaron por Sassoli, dejando a un lado el nombre de Sergei Stanishev, un candidato del este para cumplir mínimamente con el equilibrio geográfico.

El italiano ha vencido a Jan Zahradil, un checo del grupo de los ultraconservadores que ha obtenido 160 votos, ha pasado por encima la verde Keller, que se ha quedado con 199 y dejó muy atrás en la primera ronda a la española Sira Rego, que con 43 votos representaba el apoyo de la Izquierda Unitaria Europea, donde se encuentran Unidas Podemos.

Para España el pulso entre el candidato socialista y Keller era relevante. La alemana siempre se ha pronunciado a favor de los políticos presos y ha sido una de las voces más críticas con la actuación de Madrid durante todo el ‘procés’. Moncloa temía que su elección pudiera convertir el Parlamento Europeo, que había sido, con Tajani, uno de los diques de la internacionalización de la causa independentista de Bruselas, pudiera convertir a la Eurocámara en un altavoz para sus reivindicaciones.

Es cierto que Los Verdes han intentado distanciarse de los mensajes favorables a los políticos presos durante las últimas semanas, pero ese intento de corregir la postura, con el objetivo de aspirar a obtener un apoyo más amplio en la carrera de Keller por la presidencia de la cámara, empezó demasiado tarde.

Nuevo presidente

Nacido en Florencia, y como Tajani también periodista, Sassoli forma parte del Partito Democratico, la izquierda moderada italiana, que entró en una profunda crisis en 2016, cuando el entonces primer ministro Matteo Renzi perdió un referéndum para la reforma constitucional.

Sassoli llegó a la vicepresidencia con Renzi surfeando la ola. El PD superó el 40% de los votos en aquellos comicios europeos de 2014, todo un hito para Italia, y se convirtió en un ‘peso pesado’ dentro de los socialistas europeos, obteniendo un italiano, Gianni Pitella, el cargo de presidente de grupo, un puesto que ahora ha heredado la española Iratxe García.

Pero el PD no lo hizo del todo mal en las elecciones europeas de 2019. Con un nuevo líder, logró superar la barrera del 20% y quedar como segunda fuerza política, pasando por delante del anti-establishment Movimento 5 Stelle. El PD es la única oposición real en Italia al Gobierno nacional-populista que conforma el propio M5S con la formación xenófoba Lega, liderada por Matteo Salvini.

Sassoli también tiene algo de experiencia en el campo nacional. En 2012, antes de finalizar su primera legislatura como eurodiputado, el italiano trató de ser el candidato del PD para la alcaldía de Roma, pero cayó en las primarias contra el que al final mandaría en la capital, Ignazio Merino.

***Nacho Alarcón. Bruselas

@nacho_alarcon