Se externó oficialmente que la idea era estrechar y mostrarse cercanos, tanto con Hillary Clinton como con Trump para lo cual se enviaron desde la Secretaría de Hacienda, las misivas correspondientes. Aunque más tarde hubo de reconocer el propio Videgaray, que todo estaba direccionado hacia el candidato republicano, y admitir hasta frente al Senado de la República, la no inteligente forma en que lo hizo.

La irrupción a territorio mexicano de Trump, sin el conocimiento de las mismas autoridades de Relaciones Exteriores –Claudia Ruiz Massie quedó subordinada—, sorprendió no sólo a Videgaray, también a los mexicanos y claro, al nada preparado para tal situación: Peña Nieto.

Videgaray aún después del desastre, dijo que hubiera hecho las cosas de otra manera, pero tampoco reconoció que todo lo habló extraoficialmente –quizá con el aval de Peña– con su amigo Yared Kushner, yerno de Trump. En todo esto, allá en Estados Unidos, la salpicada fue la campaña de la candidata demócrata Clinton y hasta el mismo Peña mereció el reclamó de Barack Oblama.

El dramático episodio de la reelección

La reelección de Trump, es algo que preocupa a muchos Gobiernos en el mundo. México se ubica en primerísima línea por las múltiples confrontaciones que se han desatado con el inquilino de la Casa Blanca; al grado de tenernos en “visto bueno” cada 45 días, si cumplirnos o no con sus metas en temas de migración y otras cosillas que para nada son minucias: seguridad, combate al narcotráfico y estabilidad social.

Pareciera que el mismo truco del muro y los indocumentados arremetiendo en contra de nuestro país y sus pobladores, será la fórmula electoral que pondrá en marcha Trump para llegar a otro periodo de cuatro años de su estadía en Washington, luego de su primer tramo en el Gobierno.

Ante eso, los mexicanos no tenemos más que respetar la soberanía estadounidense y su mecanismo electoral del para muchos arcaico Colegio Electoral, que dio la victoria a Trump aun cuando recibió 2.8 millones menos sufragios que Hillary Clinton.

El andamiaje legal

Es la oposición estadounidense, la que ya empieza a ponerle trabas a su mandatario para obstaculizarle la reelección. Esta misma semana, se firmó en el estado de California de la Unión Americana, la ley que establece que como requisito del estado, que todos los candidatos presidenciales deben presentar los últimos cinco años de declaraciones de impuestos.

Obviamente, la bala es para Trump, he impedirle ser candidato presidencial en ese estado.

Hasta ahora mismo, Trump se mantiene en controversias institucionales múltiples por no entregar ni como candidato, ni en la Presidencia, sus reportes de pagos de impuestos.

Imposible hacer a un lado, el hecho de que, para los mexicanos, la relación desigual por desarrollos y rumbos divergentes entre México y los Estados Unidos, seguirá siendo siempre un tema espinoso que pende sobre nuestra economía y las propias agendas políticas prioritarias del Ejecutivo federal para con sus gobernados; pero también es cierto que Trump con su estilo personalísimo de maniobrar políticas públicas, dentro y fuera de su país, es por decir lo menos, estresante.

Es un hecho que cumpliendo o no con las expectativas de Trump, los mexicanos seremos como su patio trasero.

Acta Divina… “Estos son tiempos extraordinarios y los estados tienen el deber legal y moral de hacer todo lo que esté a su alcance para garantizar que los líderes que buscan los cargos más altos cumplan con los estándares mínimos y restablecer la confianza del público”, señaló el gobernador de California, Estados Unidos, Gavin Newson.

Para advertir… Aquí en México, con acuerdos migratorios en lo oscurito, nos siguen poniendo de tapete de Trump.

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