La detención de Félix Bingui, jefe de la red Yoda, y de otras 13 personas que integran el clan rival DZ Mafia, es un importante golpe a la lacra violenta que azota a la segunda ciudad francesa.
Se llama Félix Bingui, aunque le apodan El gato. Su
nombre, a priori, puede no decir nada, pero está detrás de la guerra entre
narcos que ha dejado en Marsella medio centenar de muertos en el último año.
Era uno de los capos más buscados por la Justicia francesa, el jefe de Yoda,
uno de los dos clanes que se disputan el control de los puntos de droga en
Marsella. Había buscado refugio en Casablanca, hasta que fue detenido hace unos
días.
Es un golpe importante contra el narcotráfico en
Marsella, según se felicitó el ministro del Interior francés, Gérald Darmanin,
así como por el arresto hace dos días de 13 personas implicadas en el clan
rival, DZ Mafia. Por los ajustes de cuentas entre ambos grupos, Marsella vive
uno de los peores picos de violencia en décadas. Sólo el año pasado murieron 49
personas. Son 14 más que en el año anterior. Los heridos han pasado de 18 a 43,
según los datos del Departamento de Bouches du Rhône, al que pertenece Marsella.
El escenario es cada vez peor y más violento. Disparos a
bocajarro en mitad de la calle, víctimas que aparecen calcinadas en sus coches,
incluidos inocentes que se encontraban en el sitio equivocado. En 2023, fueron
tres los muertos por balas perdidas. El caso más sangrante de estas víctimas
colaterales fue el de una joven que estaba estudiando en su habitación cuando
una bala perdida entró por la ventana y la mató.
La violencia se extiende por la segunda ciudad francesa y
salpica a otras, como Nîmes, donde también ha habido varias víctimas vinculadas
al narcotráfico. El arresto de Bingui, que será extraditado a Francia para ser
juzgado, supone un golpe para su clan, Yoda, uno de los dos que tienen el
control en Marsella. Los detenidos de DZ Mafia están acusados de intentar
asesinar a otro marsellés, que fue disparado en España en enero, en
Ampuriabrava.
Yoda y DZ Mafia son los principales responsables del
incremento de la violencia en Marsella en los últimos años. Se disputan el
control de la droga en la ciudad, sobre todo en los llamados quartier nords,
los barrios del norte. Se trata de zonas donde predomina la miseria, el
abandono escolar y la pobreza.
En estas áreas los grupos reclutan a chavales (en mucho
casos, de familias desestructuradas sin mucho horizonte de futuro) y les
introducen en las redes de droga. Al principio vigilan y avisan de las redadas
policiales, después trapichean. Acaban metidos hasta el fango y son las
primeras víctimas cuando hay un ajuste de cuentas. Son perfiles vulnerables y
blanco fácil.
El 73% de los homicidios o tentativas de asesinato que
hubo en 2023 en Marsella estuvieron vinculados a la guerra entre Yoda, que
lideraba Bingui, y DZ Mafia. "Yoda y DZ Mafia siempre han trabajado
juntos. Siempre ha habido conexiones y disensiones. Hubo un periodo en el que
hicieron la guerra y luego, de repente, empezaron a trabajar juntos de nuevo,
pero estas bandas están hoy desestructuradas, lejos del sistema piramidal y
vertical de antes", explicó a la cadena BFM Philippe Pujol, periodista
marsellés especializado en este tema y autor del libro La fábrica del monstruo
sobre la vida en los barrios del norte de la ciudad.
Pujol ha descrito es sus libros cómo funcionan estas
redes, dominadas por capos que, como Bingui, se esconden en el extranjero,
desde donde dirigen el negocio. "Cuando arrestamos al jefe de una red,
perjudicamos a toda la red. Hay un desequilibrio, ya no hay organización... La
banda Yoda se desmoronará", aseguró Bruno Bartocetti, secretario nacional
del sindicato SGP-Policía, a Europe 1.
Bingui fue llevado ante el juez el pasado sábado en
Marruecos y está en prisión provisional. Francia tendrá que hacer la petición
formal de extradición y, una vez que acceda el Reino alauí, se le trasladará.
Se trata de una etapa delicada, pues hay un elevado riesgo de fuga.
El desplazamiento se hará bajo extrema vigilancia y
probablemente participarán equipos de élite de la policía francesa, como la
RAID (especializados en toma de rehenes) o la BRI, la Brigada de intervención
de la Policía. También habrá equipos de acompañamiento cuyo objetivo es poder
desactivar posibles rebeliones, según Europe 1.
Una vez en suelo galo, tendrá que comparecer ante el
juez. Perseguido por asociación delictiva, tráfico de drogas y blanqueo de
dinero, Félix Bingui se enfrenta a al menos 30 años de prisión.