Pero las distancias son cada vez menores y los diferenciales se estrechan. Algunos analistas creen que, a diferencia del año 2006, el próximo ejercicio puede ser menos abrupto a la hora de mostrar grandes diferencias entre áreas geográficas. No está claro, sin embargo, si este proceso de igualación de mercados afectará también a los diversos sectores, aunque son mayoría quienes se permiten dudarlo ya que la actividad corporativa a nivel sectorial puede deparar muchas sorpresas, difíciles de predecir.

El año 2006 está siendo, en efecto, muy favorable para los fondos sectoriales especializados en compañías del sector inmobiliario y en empresas relacionadas con la energía y con las materias primas. En el ámbito regional, Japón ha sido este año la cenicienta roja de los fondos de inversión, de la misma forma que el mercado español de renta variable ha sido el más alcista entre los grandes mercados, aunque también, y debido a su componente energético, algunos mercados geográficos cada vez más relevantes, como Rusia, han aportado ganancias muy sustanciales a los inversores en fondos de inversión, sin olvidar a China, la economía más explosiva entre las grandes a pesar de que sus mercados de valores no están creciendo en valoración con la energía que podría derivarse de su espectacular mejoría en la actividad económica.

Diagnósticos

Por dónde van a ir las ganancias en el año 2007 es lo que se afanan estos días en investigar y diagnosticar los principales analistas y casas de bolsa. Hay muchas apuestas a favor de Japón, hay buenas impresiones para los pronósticos que apuntan a la renta variable europea como uno de los mercados más interesantes del año próximo (en parte debido, dicen algunos, al proceso de consolidación corporativa que pueden vivir las empresas y los sectores en Europa durante los dos próximos años) y hay grandes dudas sobre Estados Unidos, en donde la profundidad de la desaceleración económica es toda una incógnita. Los sectores financiero y de materias primas aparecen como favoritos en muchas quinielas mientras el furor inmobiliario parece en trance de retirada, aunque pueda seguir aportando ganancias en los próximos meses.