Los precios de las diferentes calidades de petróleo aceleraron ayer su trayectoria alcista, superando la cota de los 92 dólares por barril en el caso del crudo ligero norteamericano, en un clima de gran nerviosismo ante la creciente tensión en Oriente Medio y el constante descenso de las existencias de crudo almacenadas en los países consumidores. Estos factores se ven reforzados por la entrada de capitales especulativos en el mercado y por la llegada de tormentas a Puerto Rico y el golfo de México, donde se ubica un cuarto de la producción norteamericana de crudo y de productos derivados.

El repunte de las cotizaciones se materializó en Asia desde el comienzo de la sesión, donde se cruzaron operaciones a 92,22 dólares (64,07 euros) por barril del crudo ligero de referencia en Estados Unidos para entregas en diciembre. Horas más tarde, en Nueva York, el barril registraba un avance de 1,2 dólares, hasta 91,66 dólares (63,7 euros). En Londres, mientras tanto, el barril de Brent subía hasta el máximo de 89,30 dólares (62,06 euros) antes de replegarse a 88,45 dólares (61,48 euros).

"Con el petróleo superando el nivel de los 90 dólares, un precio de 100 dólares por barril parece cada vez más y más probable, aunque sólo sea por motivos especulativos", explicaba a la agencia Associated Press el analista en materias primas del Commerzbank, Eugen Weinberg. En este sentido, las crecientes tensiones militares en Oriente Medio y la masiva entrada de capitales escarmentados por la crisis financiera internacional que estalló en agosto sugieren que la carrera alcista del oro negro no va a detenerse a corto plazo a menos que la demanda - sostenida por China e India- no se frene, lo que todavía no parece probable a pesar de que los precios se han encarecido casi un 50% durante los últimos doce meses.

Los operadores volvieron a centrarse en cuestiones geoestratégicas y, concretamente, en Oriente Medio. El jueves, las tropas libanesas dispararon contra aviones israelíes y aunque ninguno de los dos países exporta petróleo, el mercado siempre paga una prima de riesgo ante la posibilidad de que el conflicto se amplíe y afecte a los suministros de los grandes exportadores como Arabia Saudí e Irán.

Más influencia tuvo el anuncio por parte de la Administración Bush de unas nuevas sanciones contra Irán, centradas en el cuerpo de elite de los Guardianes de la Revolución al que Washington acusa de apoyar el terrorismo y a las milicias chiíes. El enfrentamiento entre el primer consumidor de petróleo y el cuarto producto parece cada día una hipótesis más probable, una posibilidad que podría suprimir entre 2 y 2,5 millones de barriles diarios de la oferta mundial (sobre un mercado global de 85 millones de barriles diarios.)

"El mercado está realmente bastante preocupado por la oferta" de petróleo, explicaba ayer Tetsu Emori, responsable de materias primas de Astmax. La confirmación llegó el miércoles cuando el Departamento de Energía de Estados Unidos informó de que las existencias bajaron en 5,3 millones de barriles la semana pasada en vez de aumentar en 300.000 barriles como pronosticaban los analistas, con lo que se sitúan un 6% por debajo de su nivel de hace un año.

El barril de petróleo ha subido 10 dólares en un mes y 30 dólares en un año. Por este motivo, para los expertos la pregunta no es "si el barril alcanzará la cota fatídica de 100 dólares, tan temida por los consumidores y automovilistas, sino cuándo va a franquear dicho nivel", explicaba Bart Melek, analista de BMO Capital a la agencia France Presse. Y si hasta hace unos días, los expertos consideraban que los 100 dólares por barril llegarían en el 2008, ahora parece cuestión de semanas. Con todo, es preciso subrayar que, en términos reales (descontando la inflación), el barril tendrá que superar los 101 dólares para igualar el máximo alcanzado en abril de 1980, tras la revolución iraní. Como en aquel entonces, aunque ahora sin inflación, el oro - valor refugio por excelencia- suma una revalorización del 23% desde enero y cerró ayer a 780 dólares la onza (542,28 euros), su nivel más alto en 28 años, cerca del máximo de 850 dólares alcanzado en enero de 1980.