En los últimos meses el euro, las monedas de diversos países asiáticos, principalmente Japón, y de algunos países de la región como el Brasil, Chile y Perú registran apreciaciones respecto del dólar estadounidense, debido principalmente a la importante cantidad de flujo de inversión que se estaría dirigiendo a esos países. Asimismo, el oro, la plata y el petróleo registran también incrementos en sus precios.
Este comportamiento se debería a los grandes montos de liquidez generados en gran parte por las políticas de alivio monetario implementadas en Estados Unidos con el propósito de reactivar su alicaída economía. Sin embargo, dichas políticas, como lo ha reconocido la Reserva Federal (Banco Central estadounidense) durante la semana que termina, no están logrando producir los efectos esperados, ya que la economía estadounidense ha continuado creciendo a un ritmo lento en las últimas semanas y el consumo y la inversión se mantienen prácticamente planos. Ante esta situación, la Reserva Federal estaría estudiando profundizar las políticas de alivio monetario introduciendo mayor liquidez a su economía mediante la recompra de Bonos del Tesoro.
Esta posibilidad preocupa a diversos países exportadores y/o que cuentan con condiciones para atraer inversiones porque mayores flujos de capital externo pueden continuar apreciando sus monedas afectando la competitividad de sus exportaciones e inflando los precios de sus activos (inmuebles, acciones, etc.) y podría también continuar presionando al alza los precios del oro, la plata y en menor medida del petróleo.
En todo caso, los países que no ofrecen condiciones para atraer inversión extranjera y que vienen utilizando los dólares que les ingresan por exportaciones y remesas para pagar sus crecientes importaciones de bienes cada vez más caros (producto de la apreciación de la moneda de los países exportadores), no deberían preocuparse en el corto plazo por esta posible situación, salvo por los efectos inflacionarios que podrían registrarse en sus respectivas economías.
