El presidente de Bolivia, Evo Morales, ha afirmado este lunes que el objetivo de su Gobierno es erradicar la pobreza extrema de cara a 2025, propuesta que ha enmarcado en su compromiso de satisfacer todas las necesidades básicas de la población en dicho periodo de tiempo. «Tenemos conocimiento y, sobre eso, hay voluntad política. En 2025, en el Bicentenario de la antes República, ahora Estado Plurinacional, [el objetivo] es erradicar [la pobreza]», ha dicho, informa la agencia estatal boliviana, ABI.

«En 2025 [llegará] la autosuficiencia alimentaria, la seguridad alimentaria con soberanía y aquí hago un llamado a todos los hermanos del campo, empresarios, pequeños empresarios, productores y pequeños para garantizar [los alimentos]», afirmó.

El domingo, el ministro de Economía y Finanzas de Bolivia, Luis Arce, manifestó que el país ha reducido el indicador de pobreza en un 10% en áreas urbanas y en un 20% en áreas rurales durante los últimos seis años, hecho que achacó a las políticas implementadas por el presidente. «La pobreza extrema ha caído dramáticamente en nuestro país desde el 2005, por ejemplo la pobreza extrema urbana en estos seis años de Gobierno cayó en cerca del 10%, es una cosa muy importante, pero lo que más nos llena de satisfacción es lo que está ocurriendo con la caída de la pobreza en el área rural que ha caído en 20%», reseñó.

Regimiento contra la coca

El lunes, Morales había anunciado la próxima creación de una «brigada verde» cuyo objetivo sería evitar la expansión de la cultura de la coca en los parques nacionales del país, como ocurre en la actualidad. «Pronto crearemos el primer regimiento ecológico que tendrá la obligación de proteger los parques nacionales», dijo el presidente boliviano en un discurso televisado con ocasión de la fiesta nacional. Morales se felicitó de su postura «antiimperialista» que ha le permitido, asegura, luchar contra el narcotráfico «sin mucha cooperación», desde la expulsión del país en 2008 de la DEA, la agencia antidroga estadounidense. Sin embargo, según cifras difundidas recientemente por EE.UU., Perú encabeza la producción mundial de cocaína con 324 toneladas anuales, seguido por Bolivia con 265 toneladas y Colombia con 195 toneladas.

Morales admitió que su país padece las «debilidades» de la corrupción y el narcotráfico, aunque destacó que se lucha contra ellas. «Quienes siguen pensando en robar, se equivocan. Ahí está la justicia para meter a la cárcel a cualquier corrupto», afirmó. Precisamente la corrupción y el narcotráfico son los dos problemas que más avergüenzan a los bolivianos, según un sondeo en las diez principales ciudades del país, publicado por el diario «El Deber».

Desaprobación

Casi a la mitad de su segundo mandato, Morales tiene una desaprobación del 53% y una aprobación del 42%, según la misma encuesta, realizada por Captura Consulting, que preguntó en julio a 1.372 personas de las diez ciudades más importantes del país.