El gobierno mexicano, que desde 2006 libra una cruenta guerra contra los narcotraficantes, que incluye la utilización de fuerzas militares, ha asestado duros golpes a los “narcos”, pero es obvio que está lejos de levantar la bandera del triunfo. La confrontación ya ha causado la muerte de unas 10 mil personas.

Los “narcodólares”, que igual que las armas fluyen pródigamente desde Estados Unidos, mantienen todavía un inmenso poder de fuego en manos de las mafias. Solo así se explica que desde el pasado sábado, cuando la Policía Federal capturó, en Morelia, a Arnoldo Rueda Medina, alias “La Minsa”, su organización criminal “La Familia Michoacana”, inició una serie de ataques contra las fuerzas del orden en las que hasta ayer por la tarde habían muerto 16 policías y tres soldados, y decenas de heridos de ambos entes.

Pero la ofensiva también ha reafirmado los altos niveles de penetración que los “narcodólares” permiten a las mafias tanto en todos los organismos de gobierno como en la misma política.

Ya en otros países, como Colombia, ha quedado demostrado que el poder de corrupción de los narcos no tiene ni siquiera barreras ideológicas. Ante el dinero sucumben igual derechistas que izquierdistas, ya sea para enriquecerse o para financiar sus campañas políticas.

De hecho, la policía busca afanosamente al diputado electo del izquierdista PRD, Julio Godoy Toscazo, quien es acusado de hacer “lobby” a favor de “La Familia” ante las autoridades del estado de Michoacán. Para colmo, el prófugo también es hermano del gobernador de ese mismo estado, Leonel Godoy.

No hay duda de que Estados Unidos y el mundo deben replantearse la guerra contra el narcotráfico. Las estrategias actuales, como el Plan Colombia y el Plan Mérida, no están dando los frutos esperados y así como el primero solo ha logrado mover el campo de operaciones de Colombia a México, el segundo, si es exitoso, podría convertir a Centroamérica en el nuevo teatro de operaciones de los narcos.

Este es un asunto grave, que aún en medio de la crisis política que nos tiene aislados del mundo, debe preocuparnos a todos.