El acuerdo supone que se modificará parcialmente el artículo 136 del Tratado de Lisboa, la condición sinequanon que puso Alemania para dar el sí a la creación del Fondo. La razón de esta exigencia es que el Tratado prohíbe ahora a cualquier país europeo salir al rescate de otro de la Eurozona, con lo que Alemania no podría participar en el Fondo porque una medida así no pasaría el filtro del Tribunal Constitucional germano.
De este modo, y con el visto bueno de esta noche de los jefes de Estado y de Gobierno, el proceso es que en la Cumbre de marzo se aprobará definitivamente la reforma del Tratado y luego habrá ratificaciones por el procedimiento simplificado en los países hasta finales de 2011 para que, de ese modo, el Fondo pueda estar operativo en 2013.
La canciller alemana,
Angela Merkel, no quiso hacer declaraciones a la entrada de la Cumbre pero una horas antes, en la tradicional reunión del Partido Popular Europeo que se celebra antes de cada Cumbre, repitió que el Fondo de Rescate de la Eurozona de carácter permanente que se aprobará en esta Cumbre
tiene que ser una opción de último recurso, o lo que es lo mismo, cualquier país que necesite financiarse más barato en los mercados no podrá acudir a él sino que se tendrá que dar una situación extrema, tal y como ha ocurrido en los casos de Grecia e Irlanda.
Zapatero pide flexibilidad
Y, como no podía ser de otra manera, los líderes europeos, aunque no estaba en la agenda original de la reunión intercambiarán opiniones sobre los traídos y llevados eurobonos. El sentir general es que el debate es positivo en la medida que lo son todos pero que, de momento, la reunión de hoy y mañana no es para tomar una decisión sobre este asunto que aún está muy verde. De hecho Alemania, el país más importante en la UE en términos de población y de aportación al PIB europeo, ya ha dicho que está en contra.
La realidad es que en este caso a Merkel le atiende la razón porque crear unos eurobonos con los que los países europeos comunitaricen parte de su deuda le saldría bastante más caro al Tesoro alemán que la fórmula actual de que cada uno lo haga por su cuenta. Estos eurobonos le interesa sobre todo a los que tienen el diferencial de tipos de interés con la deuda alemana más elevados, como es el caso de Grecia, Irlanda, Portugal, España o Italia.
De hecho el Gobierno portugués ha asegurado esta tarde aquí que era una buena idea la instauración de los eurobonos, en la línea con la posición de algunos de los partidos socialdemócratas europeos, incluido el alemán.