La medida fue puesta en marcha en enero y más de un millar de rastros y mercados estatales ya están ofreciendo estos productos en pesos cubanos (24 por un dólar) a precios no subsidiados.

La falta de viviendas o su deterioro -agudizados por el clima húmedo y el paso de los ciclones- es uno de los problemas más severos de Cuba que en el 2005 tenía un déficit de unas 500,000 viviendas.

Granma indicó además que en el 2011 “debe comenzar a implementarse un procedimiento para ayudar a los núcleos de menos ingresos” que presenten problemas en sus viviendas.

“De esta forma, en vez de proporcionar materiales subsidiados a todos por igual, se otorgarán facilidades como créditos bancarios o subvenciones monetarias para que accedan a los materiales al mismo precio de venta”, agregó.

Según el diario oficial, se trata de un verdadero “cambio de estructura”, pues no solo se liberó la oferta a los particulares, sino que las empresas municipales de comercio -las responsable de la venta minorista- comenzaron a firmar contratos con las productoras de los materiales.

Un informe de mayo de la Oficina Nacional de Estadísticas indicó que en el 2010 se terminaron de construir 33,000 casas, inferior a las 35,000 del 2009 y de las 111,000 del 2006, cuando el entonces gobernante Fidel Castro reconoció la magnitud del problema e inició una campaña de construcción.

Hace algunos años se autorizó a las tiendas en pesos convertibles (o sea a las que operan en una moneda equivalente al dólar) a vender materiales a la población, una opción a la cual pocos cubanos podían acceder debido a los elevados costos. Además si una persona deseaba ampliar o fabricar su vivienda legalmente se veía enredado en trámites burocráticos.

Las autoridades liberaron ahora la venta de estos productos en pesos cubanos y aunque los precios se elevaron un poco se eliminaron trámites e intermediarios.

Recientemente la Gaceta Oficial publicó las listas de precios fijados por el Estado.

Mientras, funcionarios informaron la semana pasada que se autorizará a los nuevos trabajadores independientes del Estado a producir materiales para la construcción.

Estas flexibilizaciones van de la mano de un conjunto de orientaciones emanadas del recientemente concluido VI Congreso del Partido Comunista, según el cual se autorizará legalmente la venda de casas -aún falta la ley específica- y se ampliarán algunas formas de transmisión de la propiedad de las viviendas; así como los permisos para creaciones de cooperativas de construcción, entre otras.