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30/04/2006 | No Existe el Fracaso, sino grados diferentes de Éxitos

El Nuevo Diario Staff

Cuando le preguntaron a Albert Einstein si no se consideraba un fracasado después de haber intentado 999 veces producir resultados positivos, el dijo que no se sentía un fracasado.

 

Einstein explico la razón por la que no se sentía un fracasado de la siguiente manera: Ahora conozco 999 maneras en las que NO puedo producirlos, por tanto, estoy mas cerca de encontrar la forma real de producirlos.

Einstein tenia una manera extraordinaria de enfrentarse a eso que se llama “fracaso”. Y esa manera extraordinaria que poseía era un componente de su genialidad que lo llevo a descubrir tantas cosas importantes, dejando legados y contribuciones extraordinarias a la humanidad!

 La mayoría de nosotros pasamos por la vida sintiéndonos aplastados por pequeños “fracasos”. Y hacemos de esos “pequeños fracasos” nuestros dramas cotidianos, los cuales se adhieren a nuestros pensamientos, nuestras percepciones, nuestras emociones y sentimientos, nuestras conductas cotidianas. A veces permitimos que la palabra “fracasado” este pegado a nuestras frentes y nuestras espaldas para que todos la lean mientras caminamos por las calles, ejercemos nuestra profesión, practicamos relaciones amorosas, amistosas, familiares, etc. Que esta realidad descrita sea parte de las historias de tantos seres humanos es en cierta forma misteriosa. No tenemos todas las respuestas a porque, ni los sistemas educativos, ni los sistemas de gobiernos, ni los incentivos sociales, ni la familia, ni el matrimonio, y ni siquiera la iglesia con su mensaje alentador, tengan el poder de sacar del letargo miserable del “fracaso” a tantos billones de seres humanos! Estos nacen, crecen y se mueren con el pensamiento y la creencia de que son humanos “fracasados” para los que NO existen remedios curativos!!

Para estos humanos, y también para los otros que no se han permitido la esclavitud de la idea del “fracaso” inevitable, el principio que sostiene el articulo de hoy es excelentemente alentador. No existe el fracaso, sino grados diferentes de éxitos.

Un ser humano que esta vivo, y  que sigue respirando, esta dando una señal extraordinario de éxito. En el momento de la fecundación de cada ser humano, millones de espermatozoides trataron de fecundar el óvulo maduro, pero solamente uno alcanzo ese cometido milagroso! A los veinte y cinco anos de edad, la ley de la probabilidad ha estado en contra de la vida de cada ser humano miles de veces, pero en una proporción asombrosa, la mayoría sigue vivo! La vida de cada ser humano esta marcada por éxitos asombrosos que se imponen a todas las medidas estadísticas.

Cada ser humanos haría mejor entonces permanecer arraigado en el principio de que NO existe el fracaso..Este no tiene vida independiente, objetiva, tangible, sin el poder intangible del pensamiento “fracaso” y de la percepción y creencia “fracaso” que existen en el sujeto que ejecuta dicho “fracaso”. No estoy diciendo que la “realidad perceptiva fracaso” no tenga ingredientes tangibles. El “circulo vicioso” de las experiencias de “fracaso” que experimentamos es real. Es decir, ese circulo vicioso existe en nuestras experiencias fenomenológicas (lo que sabemos existe porque es parte de nuestra cotidianidad). Pero esa “realidad perceptiva de fracaso” la hemos prolongado en nuestra cotidianidad debido a nuestras creencias, percepciones y pensamientos, que a fuerza de repetirse se han hecho componentes ineludibles de nuestras experiencias subjetivas.

Si usted esta leyendo este articulo, y por anos se ha creído para usted mismo que es un “fracasado”, varias veces ha pensado ya que “que este escritor escribe disparates”. Y usted esta totalmente convencido que así es: el “fracaso” existe, y yo soy una prueba viviente de que así es, se repite en sus adentros mientras lee!

No es una tarea fácil salir de ese “circulo vicioso” y empezar a pensar primero, sentir después, y luego percibir y decir que NO existe el fracaso, sino grados diferentes de éxitos. Pero sus experiencias cotidianas les dicen miles de veces que este principio es verdadero. Cada “fracaso” que usted ha tenido en la vida, lo ha llevado a algún grado de éxito. Si usted esta leyendo estas líneas en Español, de seguro que lee y escribe español. Bueno, recuerda usted cuantas veces “fracaso” tratando de aprender a escribir o tratando de aprender a leer? Todos esos “fracasos” NO eran mas que grados diferentes de éxitos. Y por esos grados diferentes de éxitos, usted se encuentra ahora leyendo este articulo. Por otro lado, un analfabeto no tiene ni éxito ni fracaso, porque no se ha hecho la meta de aprender a leer y a escribir, además de habérsele deprivado de esa oportunidad sociológica.

 Todos los incidentes de “fracasos” contienen elementos emocionales. Y estos elementos son poderosos sostenedores de creencias y percepciones, aunque estas nos perjudiquen a corto y largo plazo. Para salir del “circulo vicioso” de los paradigmas de “fracasos” en nuestras cotidianidades, hay que empezar a pensar diferente. Este es el primer paso: empezar a pensar diferente. Este principio nos ayuda a comenzar este proceso: No existe el fracaso, sino grados diferentes de éxitos. Porque no empieza a pensar este pensamiento cuantas veces crea que ha “fracasado”?

El Nuevo Diario (Nicaragua)

 



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