Las declaraciones de Barack Obama calificando como “serio” el incidente por el armamento incautado y señalando que charlaría el tema personalmente con la Presidenta argentina, despertó críticas por parte de la dirigencia política opositora de nuestro país.

Según el peronista federal Eduardo Amadeo, “esto debe haber sonado como miel a los oídos del Canciller Twitterman que hizo esto para estar en la tapa".

"Me pregunto que estará pensando el embajador argentino en los Estados Unidos", analizó el diputado nacional, quien estimó que “todas las puertas del Gobierno norteamericano se han cerrado".

Amadeo, en declaraciones a Radio 10, aseveró que "Argentina tiene relaciones con el mundo y está teniendo una imagen lamentable. Y parece que Timerman no lo entiende".

Por su parte, la diputada nacional por la Coalición Cívica, Patricia Bullrich, señaló que “Obama yendo a una favela en Río de Janeiro -a un lugar emblemático de violencia y de inseguridad- o yendo a Chile, diciendo que era el primer país que iba a estar desarrollado en América Latina y luego, estar pidiendo en la Argentina equipos incautados que la Justicia dijo que no eran importantes, muestra el nivel de mediocridad y chatura que nuestra Cancillería le ha dado al vínculo con Estados Unidos”.

“El canciller no existe. Que Obama tenga que saltar a la Cancillería y decirle a Cristina le voy a pedir los armamentos, es porque este ministerio no existe”, dijo Patricia Bullrich a Clarín.com.

También dio su punto de vista Alberto Fernández. El ex jefe de Gabinete se refirió al conflicto por los equipos incautados al avión militar norteamericano.

“Todo lo que ha pasado es poco serio, más allá de que lo diga Obama. Dijeron que habían encontrado droga, y se trataba de morfina. Dijeron que había medicamentos vencidos, armamentos no declarados, parecía algo terrible, y era gente que venía a preparar a la policía”, detalló el ex funcionario nacional.

Fernández continuó diciendo que “una semana después el juez dice ‘acá no hay delito’, digo que no fue feliz el modo en que se trató el tema y no entiendo muy bien cuál es el planteo que existe sobre ese tema”.

“Debemos actuar con otra sensatez, yo sé que el Canciller es una persona singular, pero tanta singularidad algunas veces complica los escenarios, porque la Presidenta es una persona seria”, aseveró Alberto Fernández.

Para el ex jefe de Gabinete, “el problema no es que Obama esté enojado, el problema es que lo que hacemos está mal”.