La violencia de extrema derecha, durante décadas amenaza solamente para grupos específicos de la sociedad, se extendía al Estado entero y al orden constitucional. El hecho de que Reichsburger lo compusiesen apenas cincuenta miembros, aunque entre ellos figurasen exmilitares y personal con acceso parlamentario, hablaba más bien de una acotada amenaza de seguridad que de un verdadero peligro antisistema. Pero en el actual contexto político, puede tener otras lecturas.

Un partido populista de extrema derecha, antieuropeo y antiextranjeros, Alternativa para Alemania (AfD), se ha instalado en el segundo lugar en las encuestas con el 20%, solo por detrás de la conservadora CDU y primera fuerza más votada en buena parte de la Alemania oriental. Asociar a Reichsburger con AfD, además de no responder a la realidad, acarrearía sin duda una demanda judicial, así que aclarémoslo cuanto antes: no están relacionados. Pero como fenómenos independientes forman parte de un conjunto en el que el extremo derecho de la actitud política manifiesta una indiscutible presencia en comparación con cualquier momento posterior a la Segunda Guerra Mundial. Los componentes del fenómeno se presentan desvinculados unos de otros y sin conexión aparente, pero aún así el Ministerio de Interior ha emprendido una cruzada para ir desmantelándolos uno por uno, al ritmo que permita el trabajo de los agentes fiscales.

Esta misma semana han sido ilegalizados dos de ellos: Hammerskins Germany, que al más puro estilo clásico propaga la teoría racial nazi y se sirve de cruces gamadas y ejemplares de 'Mein Kampf', y el mucho más 'new age' Artgemeinschaft, un culto al fuego y los dioses nórdicos por parte de la única raza verdaderamente humana, que vive en el año 3.823 porque refiere su calendario a Stonehenge.

La casuística, extensa, no preocupa tanto a las autoridades alemanas como la capacidad de estos grupos de ideologizar a niños y jóvenes, así como su expresión más violenta. En 2022 aumentaron un 15% los delitos violentos de extrema derecha, hasta sumar 1.340. Más de la mitad fueron ataques racistas contra emigrantes, refugiados o negros. Cinco personas al día fueron agredidas por motivos racistas o antisemitas, según Robert Kusche, del Centro de Asesoramiento para Víctimas de Violencia Ultraderechista, en Sajonia, que destaca que muchas de las víctimas son menores. Tras los delitos hay una mentalidad: uno de cada doce alemanes tiene ideas ultraderechistas y el 6% apoyaría una dictadura, según el Mitte Studie 2023 de la Fundación Friedrich Ebert: el 6,6% quiere una dictadura, con un líder fuerte y un sólo partido, tres veces más que hace dos años. Se reparten entre una pléyade de grupos de ideología diversa y liderazgo fragmentado.

Aun así, el jefe de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución, Thomas Haldenwang, los considera la mayor amenaza para el orden básico democrático libre, porque constituyen manifestación abierta de un sentir latente y más amplio en la cultura política alemana. Y se base en los datos para afirmarlo: el 16% de los encuestados ve a Alemania como superior a otras naciones y quiere que el país obtenga el poder y el prestigio que merece; «el 38% difunde teorías conspirativas y considera a los medios de comunicación 'confabulados'»; el 13% justifica que los políticos se lo merecen si «la ira contra ellos se convierte en violencia»; el 16% considera «repugnante» que dos homosexuales se besen en público; y el 19% está de acuerdo con que «los judíos tienes demasiada influencia».

Inspiración nazi

Die Heimat (La Patria). Anteriormente NPD (Partido Nacional Democrático de Alemania), es un partido político de extrema derecha y neonazi que fue fundado en 1964 y actualmente presidido por Frank Franz, exsargento mayor de Artillería y actualmente programador. Con unos 3.000 miembros. Ha estado ocasionalmente representado en algunos parlamentos regionales.

Movimiento identitario. Su logotipo es la letra griega lambda en amarillo sobre fondo negro. En la tradición de la Revolución Conservadora antidemocrática de la República de Weimar y rechaza la idea de derechos humanos universales. Establece paralelismos entre la situación europea actual y la Reconquista española. Está compuesto por varios grupos nacionalistas de orientación étnica. Promueve el llamado 'etnopluralismo' y considera la cultura europea amenazada por la migración. Bajo observación de la BfV, inteligencia interior alemana, por sus posiciones incompatibles con la Ley Fundamental.

Reichsburger (Ciudadanos del Reich). No reconocen a la República Federal de Alemania como Estado legítimo y soberano. Desean recuperar el Imperio Alemán. Ideológicamente es muy heterogéneo, pero todos los grupos son monárquicos, antisemitas y negacionistas del Holocausto. Rechazan una sociedad abierta o pluralista y se niegan a pagar multas o impuestos.

Freien Kameradschaften (Camaradas Libres). Proceden de la ilegalización en los 90 del Partido de la Libertad de los Trabajadores alemanes (FAP). Se ven a sí mismos como parte de la llamada 'resistencia nacional'. Son unas 150 asociaciones libres, en las que los activistas no se registran por su nombre y son reclutados entre los círculos íntimos. Se encuentran en conciertos de rock de derecha. Los fundadores, el neonazi de Hamburgo Christian Worch y su amigo Thomas Wulff, apodado Steiner, copiaron en los 90 la idea de la resistencia 'antifa': organización sin organización.

Blood & Honor (Sangre y Honor). Su nombre es la consigna de las Juventudes Hitlerianas. Red internacional de extrema derecha de ideología neonazi creada en los 70 por Ian Stuart, a partir de una escisión de los 'skinheads'. Republicanos, nacionalistas y militaristas. Defienden la supremacía blanca y admiran a Adolf Hitler. Prohibida desde 20.000, pero sigue activa. En junio comenzó en Múnich el juicio contra el presunto jefe de división de Alemania y tres jefes de sección de Baviera, Baden-Württemberg y Turingia.

Uno de cada doce alemanes tiene ideas ultraderechistas y el 6,6% apoyaría una dictadura: tres veces más que hace dos años

III Vía. Pequeño partido de extrema derecha y neonazi, con unos 500 miembros, que se describe a sí mismo como revolucionario nacional. Fundado en 2013, en parte con la participación de exfuncionarios del NPD. Nacionalsocialista y el strasserista. Su lema es 'Nacional, Revolucionario y Socialista'. Tiene conexiones con el Gobierno de Bashar al Assad en Siria, con Hizbolá en el Líbano, Casa Pound en Italia, el sector Pravy en Ucrania y el Movimiento de Resistencia Nórdico en los Países Nórdicos. Sus miembros se ven como una «élite neonazi consciente que no está buscando crecimiento». En las Elecciones de 2021 presentaron listas en Baviera y Sajonia, obteniendo 7.832 votos. Utiliza el símbolo del Frente Laboral Alemán, un martillo y una espada que se cruzan.

Combat 18. El número de su nombre proviene de la posición en el abecedario de las letras A y H. Con actividad internacional y extremadamente violento. Relacionado con diversas actividades y organizaciones de extrema derecha, como el Partido Nacional Británico o la red Blood & Honor. Su miembro Stephen Erns confesó en 2019 el asesinato del político local de la CDU Walter Lübcke, por aceptar la acogida de refugiados.

Pegida (Europeos patrióticos contra la islamización de Occidente). Predica una política de inmigración restrictiva, basada en ideas étnicas y racistas. Comenzó como un grupo cerrado en Facebook y organiza periódicas y multitudinarias manifestaciones desde 2014. Según su fundador, Lutz Bachmann, los doce miembros originales se conocías de salir de fiesta y de los clubes deportivos de Dresde. Sólo tres de los fundadores eran anteriormente políticamente activos. Hoy el movimiento tiene muchas conexiones con AfD. Permance bajo vigilancia de la BfV. Rechaza los medios de comunicación convencionales como «vendidos al sistema».

El martillo de Thor

Anastasia. Movimiento religioso fundado en 1997 en Rusia central, que persigue un proyecto de asentamientos étnicos asociados a la agricultura orgánica y de ideas racistas, étnicas y antisemitas. Se inspira en los escritos de Vladimir Nikolayevich Megre, que contrapone la civilización urbana y mecanizada a la existencia rural y espiritualmente elevada. Es descrito como esoterismo de derecha y neopaganismo: sostiene que el judaísmo y el cristianismo son sistemas inventados por una casta de sacerdotes codiciosos y que Moisés, Jesús, Buda y Mahoma son sólo los antecesores de Anastasia que no alcanzaron el amor terrenal perfecto.

Hammerskins. Organización global, conspirativa y de cuadros neonazis fundada en 1986 por los supremacistas blancos Wollin Lange y Scan Tarret en Dallas. Su símbolo es el martillo de Thor. Defiende la supremacía de la clase nórdica obrera. Presentes en Alemania desde 1991, con unos 200 miembros identificados. Hasta su prohibición, publicaban revistas como Wehrt euch y Hass Attacke. Y organizaban conciertos de las bandas Hetzjagd, Frontalkraft o German Stolz Treue.

Esta misma semana han sido ilegalizados dos de ellos: Hammerskins Germany, que al más puro estilo clásico propaga la teoría racial nazi y se sirve de cruces gamadas y ejemplares de 'Mein Kampf', y el mucho más 'new age' Artgemeinschaft, un culto al fuego y los dioses nórdicos por parte de la única raza verdaderamente humana, que vive en el año 3.823 porque refiere su calendario a Stonehenge.

La casuística, extensa, no preocupa tanto a las autoridades alemanas como la capacidad de estos grupos de ideologizar a niños y jóvenes, así como su expresión más violenta. En 2022 aumentaron un 15% los delitos violentos de extrema derecha, hasta sumar 1.340. Más de la mitad fueron ataques racistas contra emigrantes, refugiados o negros. Cinco personas al día fueron agredidas por motivos racistas o antisemitas, según Robert Kusche, del Centro de Asesoramiento para Víctimas de Violencia Ultraderechista, en Sajonia, que destaca que muchas de las víctimas son menores. Tras los delitos hay una mentalidad: uno de cada doce alemanes tiene ideas ultraderechistas y el 6% apoyaría una dictadura, según el Mitte Studie 2023 de la Fundación Friedrich Ebert: el 6,6% quiere una dictadura, con un líder fuerte y un sólo partido, tres veces más que hace dos años. Se reparten entre una pléyade de grupos de ideología diversa y liderazgo fragmentado.

Aun así, el jefe de la Oficina Federal para la Protección de la Constitución, Thomas Haldenwang, los considera la mayor amenaza para el orden básico democrático libre, porque constituyen manifestación abierta de un sentir latente y más amplio en la cultura política alemana. Y se base en los datos para afirmarlo: el 16% de los encuestados ve a Alemania como superior a otras naciones y quiere que el país obtenga el poder y el prestigio que merece; «el 38% difunde teorías conspirativas y considera a los medios de comunicación 'confabulados'»; el 13% justifica que los políticos se lo merecen si «la ira contra ellos se convierte en violencia»; el 16% considera «repugnante» que dos homosexuales se besen en público; y el 19% está de acuerdo con que «los judíos tienes demasiada influencia».

Inspiración nazi

Die Heimat (La Patria). Anteriormente NPD (Partido Nacional Democrático de Alemania), es un partido político de extrema derecha y neonazi que fue fundado en 1964 y actualmente presidido por Frank Franz, exsargento mayor de Artillería y actualmente programador. Con unos 3.000 miembros. Ha estado ocasionalmente representado en algunos parlamentos regionales.

Movimiento identitario. Su logotipo es la letra griega lambda en amarillo sobre fondo negro. En la tradición de la Revolución Conservadora antidemocrática de la República de Weimar y rechaza la idea de derechos humanos universales. Establece paralelismos entre la situación europea actual y la Reconquista española. Está compuesto por varios grupos nacionalistas de orientación étnica. Promueve el llamado 'etnopluralismo' y considera la cultura europea amenazada por la migración. Bajo observación de la BfV, inteligencia interior alemana, por sus posiciones incompatibles con la Ley Fundamental.

Reichsburger (Ciudadanos del Reich). No reconocen a la República Federal de Alemania como Estado legítimo y soberano. Desean recuperar el Imperio Alemán. Ideológicamente es muy heterogéneo, pero todos los grupos son monárquicos, antisemitas y negacionistas del Holocausto. Rechazan una sociedad abierta o pluralista y se niegan a pagar multas o impuestos.

Freien Kameradschaften (Camaradas Libres). Proceden de la ilegalización en los 90 del Partido de la Libertad de los Trabajadores alemanes (FAP). Se ven a sí mismos como parte de la llamada 'resistencia nacional'. Son unas 150 asociaciones libres, en las que los activistas no se registran por su nombre y son reclutados entre los círculos íntimos. Se encuentran en conciertos de rock de derecha. Los fundadores, el neonazi de Hamburgo Christian Worch y su amigo Thomas Wulff, apodado Steiner, copiaron en los 90 la idea de la resistencia 'antifa': organización sin organización.

Blood & Honor (Sangre y Honor). Su nombre es la consigna de las Juventudes Hitlerianas. Red internacional de extrema derecha de ideología neonazi creada en los 70 por Ian Stuart, a partir de una escisión de los 'skinheads'. Republicanos, nacionalistas y militaristas. Defienden la supremacía blanca y admiran a Adolf Hitler. Prohibida desde 20.000, pero sigue activa. En junio comenzó en Múnich el juicio contra el presunto jefe de división de Alemania y tres jefes de sección de Baviera, Baden-Württemberg y Turingia.

III Vía. Pequeño partido de extrema derecha y neonazi, con unos 500 miembros, que se describe a sí mismo como revolucionario nacional. Fundado en 2013, en parte con la participación de exfuncionarios del NPD. Nacionalsocialista y el strasserista. Su lema es 'Nacional, Revolucionario y Socialista'. Tiene conexiones con el Gobierno de Bashar al Assad en Siria, con Hizbolá en el Líbano, Casa Pound en Italia, el sector Pravy en Ucrania y el Movimiento de Resistencia Nórdico en los Países Nórdicos. Sus miembros se ven como una «élite neonazi consciente que no está buscando crecimiento». En las Elecciones de 2021 presentaron listas en Baviera y Sajonia, obteniendo 7.832 votos. Utiliza el símbolo del Frente Laboral Alemán, un martillo y una espada que se cruzan.

Combat 18. El número de su nombre proviene de la posición en el abecedario de las letras A y H. Con actividad internacional y extremadamente violento. Relacionado con diversas actividades y organizaciones de extrema derecha, como el Partido Nacional Británico o la red Blood & Honor. Su miembro Stephen Erns confesó en 2019 el asesinato del político local de la CDU Walter Lübcke, por aceptar la acogida de refugiados.

Pegida (Europeos patrióticos contra la islamización de Occidente). Predica una política de inmigración restrictiva, basada en ideas étnicas y racistas. Comenzó como un grupo cerrado en Facebook y organiza periódicas y multitudinarias manifestaciones desde 2014. Según su fundador, Lutz Bachmann, los doce miembros originales se conocías de salir de fiesta y de los clubes deportivos de Dresde. Sólo tres de los fundadores eran anteriormente políticamente activos. Hoy el movimiento tiene muchas conexiones con AfD. Permance bajo vigilancia de la BfV. Rechaza los medios de comunicación convencionales como «vendidos al sistema».

El martillo de Thor

Anastasia. Movimiento religioso fundado en 1997 en Rusia central, que persigue un proyecto de asentamientos étnicos asociados a la agricultura orgánica y de ideas racistas, étnicas y antisemitas. Se inspira en los escritos de Vladimir Nikolayevich Megre, que contrapone la civilización urbana y mecanizada a la existencia rural y espiritualmente elevada. Es descrito como esoterismo de derecha y neopaganismo: sostiene que el judaísmo y el cristianismo son sistemas inventados por una casta de sacerdotes codiciosos y que Moisés, Jesús, Buda y Mahoma son sólo los antecesores de Anastasia que no alcanzaron el amor terrenal perfecto.

Hammerskins. Organización global, conspirativa y de cuadros neonazis fundada en 1986 por los supremacistas blancos Wollin Lange y Scan Tarret en Dallas. Su símbolo es el martillo de Thor. Defiende la supremacía de la clase nórdica obrera. Presentes en Alemania desde 1991, con unos 200 miembros identificados. Hasta su prohibición, publicaban revistas como Wehrt euch y Hass Attacke. Y organizaban conciertos de las bandas Hetzjagd, Frontalkraft o German Stolz Treue.