“Es importante que cuidemos el agua que es vital, no sólo para los pueblos, sino también para la población en general de nuestro país y el mundo. Pero sobre todo, para cuidar a nuestra madre tierra, porque las empresas cerveceras están succionando las venas de nuestra Pachamama, que es el agua”, sostuvo el dirigente a la Agencia de Noticias Indígenas de la Red Erbol. 

El borrador de la norma sugiere que, tanto las empresas embotelladoras de bebidas alcohólicas, de gaseosas y cervecerías, deben pagar Impuesto al Consumo Específico (ICE) por litro de agua tres bolivianos. 

Lo recaudado pude ir a un fondo que permita a los trabajadores del país una jubilación desde los 50 años de edad. “La población boliviana tienen derecho de recibir de estos impuestos adicionales para una jubilación con renta vitalicia de vejez, acorde al salario mínimo nacional a partir de 50 años de edad”, se lee en uno de los párrafos del proyecto.

Además, el documento sugiere que es importante determinar los volúmenes de agua utilizados por la Cervecería Boliviana Nacional (CBN) para la producción de cerveza, también plantea contar con políticas de regulación sobre la utilización de agua y verificar que no se esté utilizando el líquido elemento de las vertientes naturales o apertura de pozos por las fábricas de forma clandestina.

“La situación que atraviesan los nevados últimamente –agrega– registran deshielos de donde La Paz se abastece de agua. El instituto de Hidráulica e Hidrología y el Programa Nacional de Cambio Climático, ha reportando que los nevados del Illimani y Huayna Potosí están sufriendo un deshielo con más intensidad, es muy probable que de aquí a 30 años ya no disfrutemos del nevado del Illimani”.

Según un estudio incluido en el proyecto Ley, se consume aproximadamente 3HI de agua por cada HI de cerveza producida. “Por esta razón la tendencia sería reducir el consumo de agua (para la elaboración de cerveza, gaseosa, entre otros)”.