Estados Unidos insistió anoche en la necesidad de imponer sanciones a Irán por ignorar el ultimátum de la ONU para que interrumpa su programa nuclear. Anoche, su embajador en las Naciones Unidas, John Bolton, declaró que está dispuesto a debatir las medidas contra Teherán en el Consejo de Seguridad. En tal caso, se topará con la oposición de Rusia, que como miembro del consejo tiene derecho a veto. Su ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov, ha reiterado hoy su oposición a utilizar el castigo en lugar del diálogo con el régimen iraní. "Tenemos en cuenta las lecciones del pasado y no podemos sumarnos a un ultimátum que nos encierre a todos en un atolladero", dijo Lavrov. "Vivimos en el mismo mundo y debemos buscar las vías de arreglo mediante el diálogo y no del aislamiento", añadió.

Ayer acabó el plazo dado por la ONU para que Irán ponga freno a su programa de enriquecimiento de uranio. Según confirmó el Organismo Internacional para la Energía Atómica (OIEA), Irán ha hecho oídos sordos al ultimátum. La confirmación dio alas a Estados Unidos, que ha vuelto a insistir en sancionar al país persa. "El informe pone en evidencia nuestra preocupación de que Irán pretende fabricar armas atómicas. No existe una explicación para el comportamiento de Irán durante años que no sea que intenta tener capacidad nuclear", declaró anoche Bolton. Sin embargo, Bolton precisó que antes de intentar imponer sanciones a Irán en el seno de la ONU, esperará a conocer los resultados de la nueva ronda negociadora que la próxima semana mantendrán la Unión Europea y el régimen de Teherán. Bolton también restó importancia a la oposición expresada por Rusia y China -que tienen derecho a veto en el Consejo de Seguridad- a adoptar sanciones contra Irán. Ha recordado que la declaración conjunta de los ministros de Exteriores de los cinco grandes del Consejo -EE UU, Reino Unido, Francia, Rusia y China- más Alemania, bastó a la ONU para lanzar el ultimátum que expiró ayer. Reunión de la UE
La crisis nuclear iraní será analizada también en la reunión de los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea que se celebrará hoy y mañana en Lappeenranta, Finlandia. Los titulares de Exteriores de los Veinticinco discutirán el análisis de situación elaborado por el Alto Representante para la Política Exterior de la UE, Javier Solana, sobre el tema. Solana debe reunirse en los próximos días con el negociador iraní, Alí Lariyani. Portavoces del Alto Representante en Bruselas han afirmado que ese encuentro se celebrará "pronto", sin ofrecer más detelles. Bolton ha asegurado que esa reunión tendrá lugar "la próxima semana, en suelo europeo, a petición europea". "Grave amenaza"
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, también hizo ayer declaraciones sobre el tema. Afirmó que Irán debe enfrentarse a las "consecuencias" por desafiar al mundo al desarrollar un programa nuclear. En un discurso en Salt Lake City, Bush dijo que el Gobierno iraní esta empeñado en apoyar al grupo chií Hezbolá en Líbano y a los insurgentes en Irak, y decidido a obtener bombas atómicas. "El mundo se enfrenta ahora a una grave amenaza por parte del régimen radical de Irán", manifestó ante un grupo de ex soldados. "Sabemos la cantidad de sufrimiento que ha creado el apoyo de Irán al terrorismo y podemos imaginar cuánto peor sería si se le permitiera conseguir armas nucleares", añadió Bush.