‘Los abrazos’ de AMLO al crimen como política pública se han convertido en esclavitud para millones de mexicanos. El caso crítico en Texcaltitlán, Estado de México, es la prueba de la omisión criminal del gobierno.
En la guía turística del gobierno del Estado de México,
encabezado hoy por la gobernadora morenista Delfina Gómez, el municipio de
Texcaltitlán es descrito como un lugar de ensueño. "Es una encantadora
población que ha conservado el estilo de la Colonia. Es un placer observar las
típicas casas blancas con balcones llenos de plantas, techos de teja roja y
jardines salpicados de flores…”. "Los hermosos paisajes le ofrecen al
viajero el lugar idóneo para hospedarse en medio del bosque, caminar por sus
callejuelas empedradas y disfrutar del tradicional mercado de los días
martes…”.
Pero como ocurre constantemente en México, una cosa son
las ‘postales' oficiales emanadas del gobierno y otra cosa la cruda realidad.
Desde hace años los habitantes de Texcaltitlán están bajo el sometimiento del
cartel de La Familia Michoacana.
Esto lo sabía a detalle desde enero de 2022 la Secretaría
de la Defensa Nacional (SEDENA), responsable de la Guardia Nacional, hoy
encargadas de la seguridad pública en el país y obligadas a combatir a la
delincuencia organizada.
"Cobran cuota a los ejidatarios, aserraderos,
carniceros, minas, comerciantes, etc. para permitirles trabajar; en caso de que
no paguen la cuota son secuestrados y en muchos casos ejecutados, fungen como
intermediarios para la compra venta de productos (pollo, huevo, tortillas,
cerveza, carne, arena, materiales, etc.) creando un monopolio y generando
mayores ganancias para la organización”, se detalla en el informe titulado
"Panorama Delictivo Estado de México enero 2022", elaborado por el
gobierno estatal y entregado a la SEDENA por el capitán Humberto Sánchez
Chávez, Enlace SEMAR EDOMEX, Unidad de Análisis Táctico Operativo, del cual
tengo copia.
De esta forma, la Familia Michoacana actúa como señor
feudal y los ciudadanos, abandonados por el gobierno federal a su suerte, son
sus siervos. Tal vez a eso se refiere la burda reseña turística del gobierno
estatal cuando dice que Texcaltitlán evoca a la época de la "Colonia”.
‘Los abrazos' de Andrés Manuel López Obrador al crimen
como política pública presidencial iniciada desde los primeros días de su
mandato se convirtieron en esclavitud para millones de mexicanos.
Pero el viernes 8 de diciembre, la población se levantó
en guerra. Un grupo de habitantes de Texcapilla, uno de los pueblos del
municipio, desesperados por la dolosa inacción del gobierno, decidieron
organizarse para hacer lo que por ley es el trabajo del poder Ejecutivo:
defender a los pobladores y combatir la ilegalidad.
Los civiles atacaron a un comando de la Familia
Michoacana encabezada en la localidad por un sujeto apodado "Comandante
Arcelia” y por Juan Carlos Garduño Martínez, alias "Payaso”. Durante el
enfrentamiento, ninguna autoridad intervino. Desamparados, con palos y armas de
cacería, los pobladores lincharon presuntamente a "El Payaso” y a su
grupo. El resultado de la batalla fueron al menos 14 personas muertas: cuatro
habitantes y diez personas identificadas como parte del grupo criminal. Pero,
de acuerdo a informantes de áreas de inteligencia del gobierno federal con los
cuales establecí contacto, al menos fueron 20 muertos.
De acuerdo a las fichas de información emitidas por el
gobierno de Delfina Gómez, de las cuales tengo copia, las autoridades de todos
los niveles conocieron desde un día antes la tensión que había en la zona entre
habitantes y el grupo criminal. Habían advertido que irían el 8 de diciembre a
cobrar las extorsiones rutinarias y la población se estaba organizando para
confrontarlos.
Ante las narices de las autoridades federales y estatales
ocurrió el enfrentamiento.
La Familia, impune
La Familia Michoacana es un grupo criminal que se adapta
velozmente a las nuevas circunstancias. Nacida en el estado de Michoacán, fue
hegemónica durante casi todo el sexenio de Felipe Calderón, cuando el estado
era gobernado por Lázaro Cárdenas Batel y Leonel Godoy, entonces integrantes
del Partido de la Revolución Democrática (PRD) igual que AMLO. Hoy ilustres
miembros del partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).
Tras una serie de rompimientos internos, reacomodos, la
llegada de otros grupos criminales como el Cartel Jalisco Nueva Generación, el
Cartel de Sinaloa, y los cambios de partidos políticos en el poder, la Familia
Michoacana hizo alianzas criminales y políticas que le han permitido sobrevivir
y expandirse. Ahora también opera en Guerrero y el Estado de México.
En Michoacán opera aliada a otras organizaciones y han
conformado el grupo Carteles Unidos, responsable del homicidio de Hipólito
Mora, líder comunitario y de autodefensas en el municipio de Buenavista, quien
fue asesinado el 29 de junio de 2023.
Antes de morir, en una entrevista exclusiva publicada en
este espacio, Hipólito me reveló que Carteles Unidos- incluyendo Familia
Michoacana- operaban libremente en Buenavista con la anuencia y complicidad no
solo de la Guardia Nacional y SEDENA, sino también del partido oficial MORENA.
Y aseguró que apoyaron al actual gobernador de Michoacán, el morenista Alfredo
Ramírez Bedolla, para ganar las elecciones en 2021. "Amenazaron a
candidatos de otros partidos, los hacían que trabajaran para MORENA y por eso casi
en todas partes ganó MORENA. Carteles Unidos trabajó para apoyar a MORENA, la
operación electoral fue por parte de Carteles Unidos, así fue”. Informes de la
SEDENA corroboraron su dicho.
SEDENA tenía información detallada
El municipio de Texcaltitlán, donde ocurrieron los
hechos, es parte de la zona que sirve a la organización criminal de corredor
entre Guerrero y Michoacán. La Familia Michoacana es la organización criminal
predominante en el Estado de México, tiene presencia en al menos 49 municipios
del Estado de México, según el informe "Panorama Delictivo Estado de
México enero 2022” al que me referí en los primeros párrafos.
También operan en menor escala: el Cartel Jalisco Nueva
Generación, La Unión Tepito, Nuevo Imperio, Cartel del Golfo y Cartel de
Tláhuac.
Desde al menos enero del 2022, la SEDENA encabezada por
el general Luis Crescencio Sandoval, tenía conocimiento a fondo de la forma en
que La Familia Michoacana atormentaba a los ciudadanos del Estado de México y
el nombre de sus líderes.
Se identifican en el documento como miembros de la cúpula
criminal a: Johnny Hurtado Olascoaga, alias "Pez”, a su hermano José
Alfredo Hurtado Olascoaga, alias "Fresa”, a Medardo Hernández Vera, alias
"Lalo Mantecas”, a quien se ubica en el informe como "jefe operativo,
en el Estado de México” y a Josué Ramírez Carrera, "Tuerto”, como
"jefe financiero, en el Estado de México”.
Se afirma que Silverio Martínez Hernández, alias
"Comandante Fierros”, es jefe de las subplazas de Coatepec Harinas,
Ixtapan de la Sal, Tonatico y Zacualpan, Estado de México, y se señala como su
segundo al mando a Carlos Viveros Cabrera, alias "Negro” y/o
"Chapopote”.
Artemio Martínez Castrejón, alias "Mala”, es
mencionado como jefe de las subplazas de Tenango del Valle, Tenancingo, Villa
Guerrero y Malinalco. Y a Juan Moreno Salgado, apodado "Jabón”, jefe de la
subplaza de Sultepec, y a Patricio Velázquez Aguirre, alias "Verde”, jefe
de la subplaza de Almoloya de Alquisiras.
Desde entonces, era ya claramente identificado un sujeto
apodado "Comandante Arcelia” como líder en Texcaltitlán, "siendo su
segundo Juan Carlos Garduño Martínez, alias Payaso”. Según las autoridades, fue
asesinado por los pobladores el 8 de diciembre y, ahora muerto, dicen las
autoridades que también usaba el nombre de Rigoberto Sancha Santillán. Las
fotos que se han mostrado de "Payaso” no corresponden a la fisonomía y
edad de las contenidas sobre la misma persona en un informe de la Fiscalía del
Estado de México y la Fiscalía General de la República, fechado en julio de
2022, del cual tengo copia.
La Fiscalía General de la República encabezada, por
Alejandro Gertz Manero, también tiene buena dosis de responsabilidad. En julio
de 2021, el delegado de la FGR, Julio César Ulises Chávez, se comprometió con
la SEDENA, SEMAR y Guardia Nacional a trabajar coordinadamente en materia de
seguridad pública, de acuerdo con la minuta de la cual tengo copia. Ahí se
discutieron los errores de las fuerzas federales al presentar ante el
Ministerio Público a los detenidos, lo cual deriva en su liberación.
Llama la atención que, ante los claros malos resultados
del delegado de la FGR, este fue nombrado en 2023 como delegado en Guerrero,
otro estado donde opera la Familia Michoacana.
El cinismo
Dos años después de que la SEDENA, Guardia Nacional,
Marina, y la FGR tuvieron conocimiento de todo y no tomaron medidas definitivas
para proteger a los ciudadanos, los pobladores hartos tomaron medidas extremas
y se defendieron el 8 de diciembre.
El 9 de diciembre, con el cinismo que lo caracteriza y
que ha dejado profunda huella- y sospecha- a lo largo de sus cinco años de
gobierno, luego de lamentar los hechos, AMLO se lavó las manos: "…la
extorsión, el llamado pago de piso, todo esto lo tenemos que combatir, pero
entre todos”. Evade su responsabilidad jurídica de que combatir los delitos
federales es tarea suya, no de los ciudadanos. Incitar a los ciudadanos a
defenderse ante la inacción de su gobierno es mandarlos al matadero.
De hecho, ese mismo 9 de diciembre a las 15:45, en un
reporte recibido por las autoridades policiacas y militares del cual tengo
copia, se denuncia que en Sultepec circuló un convoy de entre 30 y 50
camionetas con cerca de 300 personas con armas largas y cortas, granadas y
lanzacohetes. Las personas iban vestidas con logotipos de La Familia
Michoacana, vestidos como militares. Iban en dirección a Texcaltitlán.
De acuerdo a informantes de las fuerzas armadas
federales, al menos 13 habitantes de Texcaltitlán fueron capturados por el
grupo criminal, entre ellos mujeres, hombres, ancianos y dos niñas. El grupo
exige al gobierno de Delfina Gómez, la gobernadora emanada del partido Morena,
una de las más cercanas a AMLO, que entregue a los 4 líderes de la comunidad
que organizaron el ataque armado, o de lo contrario amenazan con matar a los
civiles privados de su libertad.
En la misma actitud dolosa de AMLO, Delfina reconoció el
14 de diciembre que las personas están "desaparecidas”, no
"secuestradas” y que presume fue por voluntad propia.
AMLO y los gobernantes emanados de su partido Morena no
pueden pedir a los ciudadanos que hagan lo que ellos no quieren por complicidad
y/o negligencia. El polvorín social que reventó en la "encantadora población” de
Texcaltitlán- como casi con sorna describe la guía turística estatal- podría
rápidamente expandirse hacia otros municipios de México, cientos, que son
gobernados por la delincuencia organizada. Eso derivaría en una especie de
guerra civil. La ingobernabilidad alentada por AMLO complica aún más los
comicios presidenciales del 2024.
https://www.dw.com/es/omisi%C3%B3n-criminal-amlo-abandona-a-los-ciudadanos/a-67740943