El arresto de Miguel Ángel Beraza Villa, La Troca, ocurrido el sábado en una iglesia de Michoacán, “es el resultado de la decidida alianza entre la DEA y las autoridades policiales mexicanas”, señaló en un comunicado Michele Leonhart, directora interina de la institución.

“Junto a nuestras contrapartes mexicanas continuaremos atacando al cártel de La Familia, que no sólo controla el suministro de metanfetaminas en varias ciudades de Estados Unidos, sino que ha sido fuente de la violencia sin precedente en Michoacán”, dijo.

Como ejemplo de la criminalidad generada por el lucrativo negocio del narcotráfico, la funcionaria mencionó el reciente asesinato de 12 agentes federales en Michoacán. La narcoviolencia ha generado más de 10 mil ejecutados en la actual administración federal.

En el operativo de captura, alrededor de 200 agentes federales del gobierno mexicano decomisaron 11 vehículos de lujo, dos armas largas, dos granadas de fragmentación, 13 mil dólares, una computadora, 30 teléfonos celulares y 4 mil 500 pastillas sicotrópicas.

Tanto las autoridades de Estados Unidos como las de México aseguran que La Troca asumió el control de las actividades del cártel de La Familia desde que Arnoldo Rueda Medina, La Minsa, fue arrestado a finales de julio pasado por agentes de la Secretaría de Seguridad Pública federal.

Para la DEA, el arresto de ambos narcos “ilustra el liderazgo y la determinación del presidente Calderón y de México” en la lucha contra los cárteles de la droga.